En medio de controversias y una ola de especulaciones y críticas, respecto a la suspensión de infracciones viales en el Estado de México, vista también como estrategia electoral, en Coacalco se suscitan presuntas extorsiones por faltas administrativas, mas no de tránsito, como lo señala una investigación del periódico El Universal .
De acuerdo con la versión periodística, elementos de la policía adjudican a los automovilistas incurrir en una falta administrativa, consecuencia de circular sobre el carril confinado al Mexibus; por lo que en los límites de Ecatepec con Coacalco, docenas de conductores se ven obligados a trasladarse a oficinas de Tránsito, donde deben elegir entre 36 horas de arresto o una cuota de mil pesos.
Al respecto, el especialista en derecho de la máxima casa de estudios mexiquense, Roberto Emilio Alpizar Gónzalez, opinó que la medida decretada por el Ejecutivo estatal no es ilegal: “la infracción vial es de naturaleza administrativa y le corresponde estrictamente al ejecutivo del estado aplicarla o no; y puede proveer en la esfera de sus competencia, lo necesario para que se cumpla estrictamente el estado de derecho”.
Lo que no contempló la administración mexiquense al suspender las infracciones viales, fue la creatividad del cuerpo policiaco para implementar nuevas faltas y sanciones, diferentes a una infracción vial.
Agrega que “el hecho de que se deje de aplicar una sanción, no significa que se deje de observar la normatividad, finalmente el derecho se cumple por todos los actores de una sociedad”, por lo que no se suspende la aplicaciòn de la norma, dijo.
En este sentido, en un lapso de 90 días, los mexiquenses de 15 municipios, entre ellos Toluca y Metepec, deberán mostrar civismo y responsabilidad, frente a la aplicación de sanciones por infracciones de tránsito.
Si bien, la figura del infractor vial desaparecerá hasta el 27 de junio, la población desde su papel de peatón, conductor, y ciclista, se encuentra con la ocasión para expresar que los principios cívicos y empatía pueden estar por encima de intereses particulares, y evitar la circulación por carriles no autorizados, lo que puede ser motivo también de extorsión por elementos policiacos.