Reclusas del Estado de México denunciaron ser víctimas de extorsión, prostitución y de vivir hacinadas, con grandes carencias de higiene y alimentación, así como violaciones constantes de sus derechos en penales de la entidad.
Así lo indica un informe divulgado este domingo por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que analizó las condiciones de 77 de las 102 prisiones del país que albergan a mujeres, entre ellas las del Estado de México.
El informe de la CNDH está basado en encuestas anónimas aplicadas a internas de los diferentes penales visitados en el país.
En el caso del Estado de México, las mujeres presas del Centro de Reclusión de Nezahualcóyotl Bordo de Xochiaca, señalaron ser víctimas de abusos de tipo sexual.
La CNDH alerta también de una sobrepoblación del casi 100%, en los de Chalco y Ecatepec.
Respecto al personal de custodia de los penales, la CNDH el personal asignado para vigilar y custodiar las instalaciones destinadas a las mujeres internas es insuficiente, así mismo detalla que tanto el personal directivo y de custodia, quienes también fueron encuestados, aseguraron no recibir capacitación en materia de derechos humanos y prevención de la tortura.
El informe de la CNDH alertó también de graves deficiencias en la supervisión de autoridades superiores o de inspección de parte de los servidores públicos responsables de su administración, quienes no cuentan con un documento o bitácora para informar sobre el resultado de las visitas.
En los centros de reclusión de la entidad la CNDH detectó la inexistencia o insuficiencia de actividades laborales remuneradas, educativas y deportivas, muchas de ellas provocadas por la falta de instalaciones adecuadas como talleres, aulas y áreas deportivas suficientes y debidamente equipadas, así como de personal técnico que se encargue de llevar adelante dichas tareas.
Las internas denunciaron también una serie de irregularidades relacionadas con la falta o insuficiencia de aparatos telefónicos para el uso de las internas, restricción de llamadas a números gratuitos o sólo se permite realizarlas por cobrar.
Finalmente la CNDH identificó que las prisiones de la entidad carecen de modificaciones y adaptaciones para facilitar el desplazamiento de las personas con discapacidad física.
La CNDH urge a corregir los problemas que conllevan una discriminación de la mujer que se agrava en las cárceles y denuncia que parte de estas violaciones e irregularidades ya fueron denunciadas en un documento de 2013 pero no se solucionaron.
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