Casi medio millón de personas no encuentra una opción de empleo en el Estado de México, revela el Estudio de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social; al primer trimestre de 2014 la tasa de desempleo en la entidad fue del 6 por ciento, por arriba de la media nacional, situación que es constante desde hace 10 años.
La precarización del empleo y del salario de los trabajadores mexiquenses se mantiene como una constante; cada año se hace más evidente la brecha entre aquellos que perciben un pago mayor a 637.7 pesos diarios (10 salarios mínimos) que regularmente se emplean en cargos públicos; contra lo percibido por un obrero que no rebasa los 63.77 a 127.54 al día (de 1 a 2 salarios mínimos) con lo cual tiene que solventar gastos de alimentación, transporte y vivienda.
Al 2013 se registraban 6 millones 952 mil 279 personas activas laboralmente; de estas 363 mil 683 no tiene un ingreso por su trabajo (9 %); 559 mil 865 ganan menos de un salario mínimo (9%); 1 millón 997 mil 267 entre 1 y 2 salarios mínimos (16.1 %); 2 millones 911 mil 790 de 2 a 5 salarios mínimos (15.9 %) 268 mil 523 de 5 a 10 salarios (9.4%) 78 mil 10, más de 10 salarios mínimos (9.8%) y 773 mil 051 que no especificaron sus percepciones.
La realidad mexiquense es que 1 millón 997 mil 267 personas subsisten con alrededor de entre 2 mil y 4 mil pesos mensuales que utilizan para satisfacer necesidades básicas dejando de lado aspectos como diversión y educación.
En promedio un trabajador mexiquense percibe 5 mil 500 pesos mensuales, advierte el análisis, que en comparación con otras entidades como Baja California, donde el promedio es de 7 mil pesos, o bien el Distrito Federal 6 mil 500; los mexiquenses se encuentran en una gran desventaja, pues se advierte que los trabajos creados son pocos por año, pero además de mala calidad, y muchos de ellos no cuentan con prestaciones de ley como la seguridad social.
Es un hecho que en la entidad trabajar dentro de una oficina gubernamental o bien cargo público, es una garantía de contar con mayores percepciones; a pesar de que muchos de estos trabajos no tienen un horario establecido, tal es el caso de los diputados o regidores.