Debido a la planeación de la construcción de dos retornos vehiculares que se comenzarían a realizar el día de ayer martes 20 de junio del presente, varios vecinos de la zona y ciudadanos defensores del medio ambiente, realizaron una protesta frente a conocido centro comercial y el Instituto Electoral del Estado, sobre la avenida Paseo Tollocan, pues en dicha modificación de infraestructura urbana se derribarían alrededor de 100 árboles (o más, pues no existe un número determinado).
Muchos de los ciudadanos que fueron a la protesta se abrazaron a los árboles, en señal de la necesidad del ser humano por preservarlos, pues no solo brindan oxígeno, sino que además generan un beneficio de índole ecológico en la zona. Lo cierto es que cada árbol perteneciente a esta avenida emblemática de nuestro municipio tiene más de 40 años de edad.
Cabe señalar que la Secretaría del Medio Ambiente no ha ofrecido ningún comunicado, mientras que la Secretaría de Infraestructura del Estado se limitó a decir que por cada árbol derribado, otros 10 serán colocados en el mismo Paseo Tollocan.
Lo que nos debe preocupar mucho, pues recordemos que se nos prometió la misma situación en las obras realizadas en la carretera México- la Maquesa- Toluca, donde se talaron 37,096 árboles y hasta el momento no se ha sembrado ninguno; pero también es necesario saber que no basta con solo plantar un árbol, pues hay que cuidar y vigilar que el proceso de crecimiento se lleve de forma natural, pues existe el riesgo constante de que en la época de sequía mueran.
Ahora bien, ¿qué está ocurriendo con la realización de obras, generan o no un ecocidio?; lo cierto es que a la destrucción extensa o a la perdida del ecosistema de un territorio concreto, de naturaleza deliberada y masiva, bien por medios humanos u otras causas, que como consecuencia la existencia de los habitantes del territorio se vea amenazada, es considerado un ecocidio (según información de diversos organismos internacionales, como la ONU).
Así que valdría la pena que las autoridades reconsideren opciones verdes a la hora de generar construcciones e infraestructura, como muros verdes, recolocación de los árboles talados, entre otras; que si bien son más caras, a la larga el costo beneficio es mucho mayor para todos.