En la escuela primaria Niños Héroes, ubicada en el municipio de Tezoyuca, hay una escalera fantasma. A finales de 2018, el gobierno del Estado de México rehabilitó los baños del plantel, dañados por el sismo del 19 de septiembre de 2017. Ya que la primaria no contaba con una escalera de emergencia, también se construiría una. Pero esto nunca pasó.
De los siete millones de pesos (mdp) que costó la obra, los trabajos correspondientes a cuatro millones de pesos, incluyendo la escalera, no se realizaron aunque se pagaron. Es decir, sólo se rehabilitó lo equivalente a un tercio del dinero invertido.
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Pese a lo anterior, Construcciones Instalaciones y Montajes Especiales, S. A. de C. V. nunca fue sancionada por el Instituto Mexiquense de la Infraestructura Física Educativa (Imife). Por el contrario, esta dependencia, encargada de construir y remodelar espacios educativos en la entidad, siguió contratando a dicha empresa para rehabilitar más escuelas.
Como este hay decenas de casos. Durante el gobierno de Alfredo Del Mazo, el Imife acumuló al menos 50 obras que se entregaron incompletas, con semanas o meses de retraso o con trabajos de mala calidad. En otros casos se detectaron vicios ocultos o irregularidades administrativas en la contratación.
Más de la mitad de las obras tenía el objetivo de reparar escuelas públicas dañadas por el sismo de 2017 o rehabilitar centros educativos para infancias con discapacidad. El monto total de estas remodelaciones asciende a 310 millones 223 mil pesos. Todos estos recursos fueron entregados por el gobierno federal al Imife y auditados por órganos de fiscalización que detectaron las irregularidades. Las observaciones realizadas por estos entes, recopiladas y revisadas por AD Noticias, acumulan un gasto de 167 millones de pesos que no ha sido esclarecido.
La vigilancia constante de estas obras públicas previene que no repitan irregularidades, explica María Teresa Gutiérrez, directora de análisis de indicadores en Mexicanos Primero, organización enfocada en el derecho a aprender de las niñas y niños. Pero en el Estado de México, las remodelaciones a medias se acumularon por decenas durante todo el sexenio pasado.
“Desde las contralorías estatales aparecen los focos rojos para no llegar hasta la Auditoría Superior de la Federación. No deberían aparecer tantas irregularidades”, comenta al respecto Gutiérrez en entrevista con AD Noticias.
Veinte de las empresas involucradas reportan como su domicilio fiscal lugares que no corresponden a los de constructoras sino a tiendas, casas de empeño, salones de belleza, entre otros. Al menos 17 de estas compañías están conectadas entre sí y simularon competencias para conseguir los contratos. Una de ellas sigue construyendo para la administración morenista.
Símbolos del retraso
“Esta escuela se convierte en un símbolo de trabajo y de cómo salir adelante de los momentos difíciles” declaró el exgobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo, frente a cientos de infancias y padres de familia de la secundaria 52 Ehécatl, ubicada en el municipio de Ecatepec, en el Valle de México.
El 19 de septiembre de 2019, el último gobernante del grupo Atlacomulco se presentó en el plantel para inaugurar su reconstrucción, ya que quedó completamente destruido por el sismo de 2017. Sin embargo, contrario a lo que se presumía, la obra llevaba ya casi un año de retraso, respecto a lo estipulado por el contrato.
Tras el sismo de 2017, el Estado de México fue la entidad con mayores afectaciones a la infraestructura escolar. Casi cinco mil escuelas mexiquenses sufrieron daños, entre ellas la secundaria Ehécatl, donde una estudiante, Johana Arlette Vera Salazar, de 11 años, murió a causa de la caída de una barda perimetral.
Para reconstruir la escuela, en 2018 el Imife contrató a la empresa Infraestructura y Desarrollo Integral DICSSA, S. A. de C. V. por 43 millones de pesos. La obra tenía que ser terminada en octubre de ese año; sin embargo, a finales de 2023 apenas comenzaban los trabajos de reconstrucción.
En diciembre de 2018, padres de familia y alumnos de la secundaria protestaron por los retrasos. “IMIFE no cumple”, decía una de las pancartas. Debido al retraso de la obra, los estudiantes tuvieron que tomar clases en una iglesia cercana, donde no había baños habilitados y se filtraba el agua del techo. “En la entrada hay un montón de basura porque no pasan por ella”, denunciaba un alumno al medio local CiberNoticias.
El Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) detectó el retraso en la obra del Imife; además denunció que había documentación técnica y financiera, justificativa y comprobatoria del gasto de la obra pública.
Seis años después, la fachada de la escuela se ha pintado de color guinda y con un colibrí de la actual administración morenista. Sin embargo, los estudiantes siguen sin sanitarios habilitados.
En los baños de hombres falta instalar un mingitorio y sustituir las llaves de los lavabos, ya que no sirven. Los alumnos tienen que usar una cubeta para lavarse las manos, cuya agua ya está gris por el uso constante.
Escuelas (casi) al CIEN
Como la primaria Niños Héroes y la secundaria Ehécatl hay otros 18 casos de escuelas afectadas por el sismo de 2017, cuyas reconstrucciones han implicado retrasos y obras incompletas o de mala calidad.
En Ocuilan —donde todas las escuelas resultaron dañadas, según un informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH)— la reconstrucción de la primaria Vicente Guerrero tuvo un mes de retraso, además no se encontraron documentos para comprobar la inversión de 25 mdp.
En Coacalco, siete millones 782 mil pesos se gastaron para rehabilitar los baños, plaza cívica y las rampas de la secundaria general Ángel Ma. Garibay. Sin embargo, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó que 927 mil pesos fueron pagados pero no ejecutados. Lo anterior quiere decir que la obra se entregó incompleta, aunque se pagó en su totalidad.
También se identificaron obras de mala calidad, correspondientes a 433 mil pesos. Y aunque el Imife debió aplicar penas convencionales a la empresa Construcciones Instalaciones y Montajes Especiales por 778 mil pesos, no lo hizo. Por su parte, el OSFEM tampoco encontró los documentos necesarios para comprobar la inversión.
En la fachada de la secundaria aún está un anuncio de aquella obra, hecha con recursos federales del programa “Escuelas al CIEN”. El letrero está tapizado por las grietas de la pintura, resultado del sol y el viento, de graffitis sobre esta obra a medias.
Obras peligrosas para infancias con discapacidad
“Queremos que todos los CAM (Centros de Atención Múltiple) del Estado de México estén en buenas condiciones […] Yo siempre lo he dicho. En la educación no se gasta, se invierte. Es la mejor inversión para sus hijos”, insistió Alfredo Del Mazo a un grupo de padres y madres de infancias con discapacidad.
Era febrero de 2023 y Del Mazo Maza entregaba la rehabilitación del Centro de Atención Múltiple 64 María Montessori, en Villa Victoria. Pero la obra se retrasó más de un año, pues debía terminarse en agosto de 2021.
Uno de los compromisos del gobernador priísta al inicio de su administración fue rehabilitar los 171 CAM —escuelas especializadas para infantes con discapacidad — que hay en el Estado de México. Sin embargo, durante el evento en Villa Victoria reconoció que aún faltaba concluir nueve de estas obras.
Ni el político ni el Imife volverían a hacer una declaración pública sobre este compromiso. De cualquier modo, ocho de estas rehabilitaciones se entregaron incompletas: si bien se detectaron conceptos de obra, valuados en 13 millones 326 mil pesos, que se pagaron, la realidad es que no se efectuaron.
Una de estas obras fue la del CAM María Montessori, el mismo centro que Del Mazo presumía en el evento. “Se está equipando para que esté en mejores condiciones”, se limitó a decir sobre la obra.
En esta escuela, el Imife aprobó deductivas de obras, es decir, aspectos de la rehabilitación que ya no se necesitaba realizar. Pero no había ninguna justificación para el cambio de planes ni se aclaró qué pasó con el dinero “ahorrado”. Estos “ahorros” irregulares sucedieron en otros cinco centros para infancias con discapacidad, por un total de 17 millones 755 mil pesos. Se desconoce el destino final de estos recursos.
En Tepotzotlán, la rehabilitación de 2021 del Centro de Atención Múltiple 19 Rosa Imelda Soto Millán no sólo se entregó incompleta, y con “ahorros” injustificables, sino que dejó al CAM peor que como estaba antes. En su revisión del centro, el OSFEM detectó que en la zona rehabilitada había fisuras y grietas que ponían en riesgo a las infancias con discapacidad del centro.
AD Noticias solicitó una entrevista con la directora del CAM, Eva Alcántara, para conversar acerca de estas irregularidades y preguntarle si actualmente el lugar es seguro para sus estudiantes. Aunque inicialmente la directora accedió, horas después indicó que sus superiores no le dieron autorización para hablar con ningún medio.
“Discúlpeme, pero no quiero meterme en ninguna problemática legal”, fue su última respuesta a nuestros mensajes. Esta respuesta fue constante entre los 20 directores y directoras consultados para este reportaje.
Red de tiendas, salones de belleza y domicilios particulares o ilocalizables, detrás de las irregularidades
Al revisar registros mercantiles y documentos sobre las contrataciones de las 50 obras incompletas, de mala calidad y/o con retrasos del Imife, AD Noticias encontró que 21 de ellas fueron realizadas por una red de 17 empresas que están conectadas entre sí y cuyos domicilios no corresponden a los de constructoras.
Fuvasak, S. A. de C. V., por ejemplo, se ubica en el número 19 de la calle Hacienda San Diego de los Padres, en San Mateo Atenco. Ahí se encuentra el salón de belleza Nueva Imagen, donde se ofrecen cambios de look así como cortes para novias y quinceañeras.
La ASF detectó vicios ocultos y trabajos de mala calidad y pagados, pero no realizados en la rehabilitación que Fuvasak hizo del Conalep 183 de Atizapán a inicios de 2023.
Los domicilios de Constructora y Comercializadora Laquin, S. A. de C. V. y Comercializadora Render, S. A. de C. V. no registraron ningún número externo en la dirección para poder encontrarlas, por lo tanto resultaron ilocalizables. Ambas compañías entregaron remodelaciones incompletas de escuelas.
En algunos casos, esta red de empresas simuló competencias para conseguir contratos. Tal es el caso de las competidoras de la rehabilitación de la escuela primaria Carlos Hank González, ubicada en Metepec: Agleuta, S. A. de C. V., Grupo Electromultidisciplinario G de Toluca, S. A. de C. V. y Constructora y Comercializadora Tierrazol, S. A. de C. V.
Las tres firmas —que concursaron en mayo de 2023 para rehabilitar cuatro edificios de dicha primaria— comparten representantes legales con el Imife; estos se van alternando para representar a otras empresas de la red, para otras obras públicas de la dependencia.
Pese a que la simulación de competencias es ilegal, el Imife entregó el contrato por cinco millones de pesos a Agleuta. Sin embargo, la rehabilitación se entregó incompleta, detectó la ASF.
Agleuta reporta como domicilio una tienda de mochilas, sobre la calle Venustiano Carranza del municipio de San Mateo Atenco. A menos de 50 metros de distancia, sobre la calle vecina Juárez, está una tienda de empeño, ahí se ubica otra empresa de la red, Constructora LINSA, S. A. de C. V. Linsa y Agleuta comparten dueños y representantes.
Empresa sigue construyendo para administración morenista
En 2023, el Imife ofertó un contrato para rehabilitar el edificio R del Instituto Tecnológico de Tlalnepantla (ITT). En este edificio, el más grande de la escuela, está un laboratorio para los estudiantes de ingeniería mecánica y el aula magna del plantel.
Sin embargo, las tres empresas a las que invitó a competir por la obra comparten dueños y representantes: Mantenimiento Óptimo Profesional, Calicinsa, Calidad de Construcciones de Ingeniería y Proyectos y Obras Trero.
Roberto Rodríguez Yada es socio fundador de Mantenimiento Óptimo Profesional y Proyectos y Obras Trero. La otra socia fundadora de Trero, Guadalupe Trejo González, fue apoderada de Calicinsa. Las representantes legales de cada empresa firmaron como parte de sus compañías hermanas para otros concursos del Imife.
Al final la dependencia entregó el contrato a Mantenimiento Óptimo Profesional por cinco millones de pesos, de acuerdo con el contrato conseguido vía solicitudes de transparencia. Sin embargo, en octubre de 2024, la ASF detectó que la obra se entregó incompleta. Faltaban trabajos por 469 mil pesos.
Aunque la obra debió terminar en septiembre de 2023, para marzo de 2024, el Instituto Tecnológico de Tlalnepantla reconoció en un informe que seguían haciendo trabajos para rehabilitar el edificio. En un recorrido hecho por las instalaciones, AD Noticias constató que el lugar aún no ha sido rehabilitado La parte exterior del edificio sigue con cuarteaduras y al interior están esparcidos materiales de construcción; mientras que los baños y el auditorio se encuentran suspendidos por la remodelación.
A pesar de que el contrato se obtuvo de forma ilegal y la rehabilitación terminó incompleta, el Imife autorizó un encarecimiento de la obra por un millón 412 mil pesos, por “conceptos adicionales a los previstos originalmente”, de acuerdo con el acta de finiquito. La dependencia, ya bajo la gestión morenista de Hernando Peniche Montfort, respaldó el cumplimiento de la rehabilitación a medias, vía transparencia.
Para esta investigación se solicitó una entrevista con el Imife, dependencia responsable de estas remodelaciones a medias y/o con irregularidades. Sin embargo, al cierre de edición no hubo respuesta.
Desde finales de 2023, el Imife mantiene en la opacidad los contratos sobre infraestructura escolar del Estado de México que, por obligación, debería hacer públicos. A la fecha esto no ha pasado.
No obstante, AD Noticias encontró vía transparencia que la empresa Mantenimiento Óptimo Profesional sigue rehabilitando escuelas para el Imife, pese a todas las irregularidades encontradas. Bajo la nueva administración morenista, la empresa ha recibido nueve contratos de obra pública. La suma de estas obras asciende a 29 millones 414 mil pesos.
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Para María Teresa Gutiérrez, de Mexicanos Primero, es necesario tener mayor claridad y transparencia sobre los recursos de infraestructura escolar. Y priorizar las carencias más fundamentales en las escuelas del país.
“Contar con condiciones dignas es tan importante como contar con los libros de texto”, sostiene Gutiérrez, quien explica el Estado de México no es la excepción: “De acuerdo con la información que hay para el ciclo escolar 2021-2022, en el Estado de México el 14 por ciento de las escuelas no tienen servicio de agua”.
Entretanto, el Instituto Mexiquense de la Infraestructura Educativa (Imife), no ha revelado si las remodelaciones a medias de la administración continúan en la actual gestión.
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