El veterano mariscal de campo Tom Brady se embarca a partir de este sábado en otro viaje récord por la postemporada de la NFL liderando a los Tampa Bay Buccaneers frente a Washington, un equipo que llega entusiasmado a dar pelea de cara al Super Bowl.
Después de una temporada regular tumultuosa, con vaivenes en un calendario marcado a fuego por la pandemia de coronavirus, la línea de meta finalmente está a la vista para los 14 equipos que se metieron en una pretemporada ampliada que culmina en el Super Bowl.
Para Brady, de 43 años, es un fin de temporada crucial en su intento de sumar un séptimo anillo de Super Bowl, tras los seis que acumuló durante dos décadas de dominio con los New England Patriots.
En marzo, Brady generó un terremoto en la NFL al anunciar su partida de Nueva Inglaterra. La sorprendente decisión del estelar jugador sorprendió a la Liga y asus millones de fanáticos alrededor del mudno, el cambio valió la pena.
Si bien la medida sorprendió en ese momento, la decisión de dirigirse a nuevos pastos ha valido la pena para Brady.
A pesar de un debut incierto en septiembre -cedió dos costosas intercepciones, incluido una en regreso de touchdown en una derrota 34-23 ante Nueva Orleans- Brady ha mejorado justo a tiempo para los playoffs luego de una temporada con balance de 11-5.
Los Patriots, por el contrario, serán espectadores frustrados a medida que comience la postemporada, tras quedar fuera de los playoffs por primera vez en 12 años.
Expectativas superadas
El entrenador de los Bucs, Bruce Arians, aseguró que Brady ha «superado totalmente» las expectativas desde su llegada a Florida.
Para Arians su mariscal es «un entrenador en el campo» durante los juegos.
«Su liderazgo está más allá de todo lo que he visto. Peyton Manning (ya retirado) es lo único que está más cerca», agregó.
Mientras tanto, Brady se prepara para extender un récord de la NFL extremadamente difícil de superar.
Ante Washington, en el FedEx Field, sumará su apertura número 42 en playoffs. El gran Jerry Rice de los San Francisco 49ers es el siguiente en la lista de todos los tiempos con 29 aperturas.
Una victoria sobre Washington vería a Brady estirar su récord de victorias de postemporada como mariscal de campo a 31, casi el doble de los 16 acumulados por Joe Montana.
También rompería el récord de victorias como visitante en los playoffs: actualmente está empatado a siete con el exmariscal de campo de Baltimore Joe Flacco.
El astro de la NFL, quien también posee récords de postemporada en yardas aéreas, pases completos y touchdowns, rara vez ha mostrado interés en los hitos estadísticos personales, prefiriendo invariablemente concentrarse en la meta de turno.
El sábado, esa actitud se traducirá en mantener sus ojos fijos en Washington, un equipo que llegó a los playoffs luego de ganar la División Este de la Conferencia Nacional con un récord negativo de 7-9. Una estadística que pierde peso cuando se saca a luz que el equipo cuenta con la segunda mejor defensa de la liga, liderada por el novato Chase Young.
«Tenemos las manos ocupadas con esa línea defensiva, una de las mejores de la liga», dijo Brady esta semana.
Sábado de alto voltaje
El encuentro de Tampa Bay con Washington es el último de los tres juegos de comodines programados para el sábado, en los que los Buffalo Bills intentarán asegurar su primera victoria en los playoffs desde 1995 en casa contra los Indianapolis Colts.
El otro partido del sábado es un duelo de pesos pesados entre Seattle Seahawks y Los Angeles Rams, rivales de la División Oeste de la Conferencia Nacional.
Los Seahawks convencieron con un 20-9 sobre los Rams durante su encuentro de temporada regular el 27 de diciembre, y comenzarán como favoritos en el Lumen Field de Seattle.
Mientras tanto, los Rams se dirigen al juego con la mejor defensiva de la liga, pero la incertidumbre gira en torno a su atropellada ofensiva.
El mariscal de campo Jared Goff está en acción luego de una cirugía en un pulgar lesionado, lo que significa que el entrenador Sean McVay puede recurrir al respaldo de John Wolford.
Asimismo, los Rams podrán contar con el tackle ofensivo del gigante Andrew Whitworth, el jugador de 39 años que ha tenido un regreso notable después de sufrir lo que se temía fuera una lesión de rodilla que lo sacara del fin de temporada.
«Tiene esa mirada en sus ojos», dijo McVay. «No querrás molestar a Whitworth esta semana. Mantente fuera de su camino. Estamos emocionados de tenerlo de regreso».