El magistrado Ismael Hernández Alemán y el juez Manuel Alejandro Martínez Vitela continúan ejerciendo cómoda y libremente como juzgadores en el Poder Judicial del Estado de México. El Consejo de la Judicatura, que preside Ricardo Sodi, no los ha tocado ni con el pétalo de una flor. Por el contrario, quien encabeza al órgano que debería revisar y, en su caso, sancionar sus controversiales —por decirlo suavecito— actuaciones parece estar de su lado.
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Un año antes de que la comunidad universitaria sea formal y legalmente convocada a participar en el proceso de elección de rector de la Universidad Autónoma del Estado de México para el periodo ordinario 2025-2029, la lista de aspirantes es tan visible como interminable. Todos quieren, pero solo una o uno podrá. La percepción de que pueda ser una mujer, preferentemente del Valle de México, se consolida en la conversación cotidiana. Desde ahora puede colocarse en el grupo «wannabe» a la coordinadora de Unidad Académica de Chimalhuacán, Perla Jessica García Manzano; al director del Centro Universitario de Texcoco, Juan Carlos Ramos Corchado; a la secretaria de Administración, Eréndira Fierro Moreno; a la secretaria de Investigación, Martha Patricia Zarza Delgado; y, al contralor Victorino Barrios, entre otros.
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Para variar, quien está muy interesado en meter la mano en el proceso universitario es el ajonjolí de todos los moles, el senador morenista Higinio Martínez, quien tiene en el exrector, exsecretario de Educación y exsecretario adjunto del PRI estatal, Efrén Rojas, a su operador de confianza. Veremos si se le permite contaminar el proceso.
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Por cierto, a propósito de la UAEMex, dos exrectores están en aprietos. Ambos están involucrados en tramas de corrupción. Uno, le metió durísimo la mano al dinero de las cuotas de los alumnos y se le encontraron hasta pagos de boletos para viajar con todo lujo a Las Vegas a ver una de las peleas del Canelo. Al otro, le investigan los negocios que hizo en la ampliación de escuelas, dando contratos a su hija arquitecta. Tremendos.
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Paola Jiménez sigue firme en pos de la candidatura a la alcaldía de Toluca. Sus ventajas competitivas la mantienen tranquila. Sus niveles de aceptación y reconocimiento popular son mayores a los de sus adversarios, pero sobre todo, sus negativos son pequeños comparados con el resto de aspirantes del PRI y PAN. Quizá lo que más le pesa a Paola es su cercanía con un Elías Rescala muy debilitado.