Toluca, México. 21 de abril de 2019. Toluca necesitaba ganar para mantener esperanza. Enfrente de un clásico rival: un América necesitado de puntos. Prometía un partidazo de Semana Santa. Así se dio.
El ambiente que rodeó al estadio Nemesio Diez fue de tensión. Faltando 20 minutos para el inicio del partido las tribunas se encontraban al 70% de su capacidad. En los accesos de las zonas de los grupos de animación la policía –que aumentó el número de elementos– hizo férreas revisiones. “Traes tu mona o qué cabrón” dijo un elemento de seguridad del estadio a un aficionado descamisado.
Mancuello hizo rugir al Infierno justo comenzando el partido. Durante el inicio Toluca salió jugando y tuvo posesión de balón, pero a pesar de la intensidad no logró hacer el segundo.
Desde el 20' América presionó al Toluca durante diez minutos. Al 36' Roger Martínez, luego de una mala salida del arquero Alfredo Talavera calmó el ánimo en el estadio. La afición americanista se hizo notar. Fin del primer tiempo. A descansar.
El inicio del segundo tiempo igual de intenso. El cuadro azulcrema puso una bola en el poste en la siguiente en jugada una descolgada por derecha se comete una falta que es revisada por el VAR, estrategia que ha causado más polémica que certeza. El árbitro Luis Santander hizo su show. Dudas, revisiones, reclamos.
Mientras avanzaban los minutos, Toluca desesperaba. Es la descalificación casi matemática. Otra jugada llena de corazón de Guigliotti terminó en asistencia para Alexis Canelo quien sólo empujó el balón a gol. El grito fue ensordecedor. La gente cantó "Matador" como nunca en el torneo.
¡Gooool del Canelo! En otra jugada acomodada, Alexis sólo tiene que empujar el balón, pero de qué manera, un machucón que dejó el grito trabado en las gargantas de la afición del Toluca que llenó el estadio.
América jugó frontón al final del partido. El corazón resiste mucho. Los seis minutos más largos del torneo ¡Diablos! La gente ayudaba al reloj. La última esperanza del Toluca se jugaba esta tarde y se la dio el América.
Los juegos perdidos en el periodo de Cristante hicieron que, a pesar de las victorias, Toluca dependa de otros resultados. El siguiente partido, contra Pumas, es de renovación, el de hoy fue de resurrección.