Convencidos de que los rayos de Sol del inicio de primavera dan energía, cientos de personas se dieron cita en las Pirámides de Teotenango, para recibir la energía del astro rey.
Sin importar que en esta ocasión en lugar de rayos solares hubiera viento intenso, cientos de personas asistieron vestidos de blanco acudieron a cargarse de energía.
Este fue el caso de la señora Teresa, que estuvo puntual como cada año, para ser parte de la ceremonia del encendido del fuego nuevo a las 12 en punto del día. Ella dice que es parte de su cultura y le gusta asistir a disfrutar de las enseñanzas que le heredaron sus ancestros, “conocemos otras cosas pero no conocemos nuestra cultura y venir aquí en este día te llena de sabiduría”.
Justo a las 12:00 horas que se realizó el encendido del fuego nuevo, la multitud celebró con cantos, oraciones y flautas la llegada de la primavera, mientras colocaban las palmas de las manos hacia arriba para “recibir energía”.
Hay quienes asistían por primera vez y quedaron sorprendidos por “lo bello que son nuestras tradiciones, sientes una energía diferentes aquí entre tanta gente, además de que ayudamos a que las tradiciones no se pierdan”, comenta Lucía.
Otras personas, además de tomar energía para obtener lo mejor en el nuevo ciclo tanto en producciones en tierra como humanas, aprovechaban para realizarse limpias, mismas que se realizaban de pie, en apenas dos o tres minutos, a la vista de todos y sólo con algunas yerbas, copal y palabras en voz baja.
La mayoría de las personas asiste en familia, en grupos de amigos o en pareja todos con dos objetivos cargarse de energía y pasar un buen rato.
“cada año venimos en familia, para que nosotros como adultos retomar lo que ya perdimos y trasmitirlo a los que vienen a tras de nosotros, hijos, nietos, estas tradiciones”, nos comenta con Luis al termino de su limpia.
Policías estatales y municipales fueron los encargados de cuidar el orden en esta zona.