Para la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México “no se realizarán adquisiciones de terrenos privados” declaró el Secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), Jorge Carlos Ramírez Marín, en conferencia de prensa celebrada la mañana de este jueves.
Las declaraciones de Ramírez Marín reforzaron las palabras del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, quien afirmó que se respetarán las propiedades privadas colindantes a la nueva infraestructura, pues el proyecto se realizará en terrenos federales.
El nuevo aeropuerto se construirá en terrenos de propiedad federal localizados a 10 kilómetros del actual, al oriente de la Ciudad de México, en una superficie de 4 mil 600 hectáreas.
Hace más de una década, las autoridades federales presentaron un proyecto de un nuevo aeropuerto en una zona cercana al actual, aunque las protestas de los habitantes de Sal Salvador Atenco provocaron que el gobierno cancelara el plan y en su lugar se decidiera sólo ampliar las instalaciones de la terminal aérea que ya existe, el cual trabaja al máximo de su capacidad.
Pese a las declaraciones de los funcionarios federales, el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de San Salvador Atenco se han declarado “en alerta” ante la posible amenaza a sus propiedades.
Los comuneros advirtieron que defenderán contra todo sus tierras, pues son permitirán que la construcción del nuevo aeropuerto se expanda a sus tierras, que en 2001 el gobierno intentó expropiar.
Ignacio del Valle, uno de los líderes del FPDT, advirtió que “para nosotros es el despojo. La resistencia no la hemos dejado de hacer, eso es sabido de todos, y nuestra postura es resistir, tenemos que agotar todo lo que sea necesario para defender la tierra… el área donde tienen proyectado ese aeropuerto, está invadiendo con antelación, pusieron esas casetas de vigilancia en donde ya no nos permiten el paso a los que somos dueños de estas tierras, creo que no es una intimidación, ya es una agresión directa”.
La tarde de este miércoles, una docena de cohetones fueron lanzados desde la plaza central de San Salvador Atenco, para convocar a los ciudadanos.
De manera inmediata se concentraron en la plaza central con cárteles que evocan a Emiliano Zapata y con machetes desenfundados.
Hay que recordar que en 2001, durante la presidencia de Vicente Fox, se impulsó el proyecto para la construcción de un nuevo aeropuerto que pretendía expropiar 4 mil 550 hectáreas de terrenos.
Dicho proyecto provocó una serie de manifestaciones en contra, por lo que el 3 de mayo de 2006, el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto mandó reprimir a los habitantes de San Salvador Atenco, bajo la coartada de un conflicto entre vendedores ambulantes que derivó en el bloqueo de la carretera federal Texcoco-Lechería.
La Policía Federal Preventiva de México, la entonces Agencia de Seguridad Estatal del Estado de México (ASE) y la policía municipal enfrentó a simpatizantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) y otros adherentes a La Otra Campaña del EZLN, que dejó como resultado el fallecimiento de Alexis Benhumea y Javier Cortés, la detención de más de 200 personas, y denuncias contra elementos policiacos por presuntas vejaciones y violaciones sexuales a 26 mujeres.
(Con información de agencias)