Toluca. México; 22 de marzo de 2018. El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, dimitió de su cargo al frente del Ejecutivo de su país dados los escándalos de corrupción por financiamiento de su partido por la empresa brasileña Odebrecht. Sin embargo, en México, el Congreso bloqueó una iniciativa para investigar el caso Odebrecht en contratos con Pémex.
La tarde de ayer, Kuczynski emitió un escueto mensaje a la televisión nacional peruana, en el que indicó que renunciaba a su cargo para no entorpecer el combate de la corrupción en su país, aunque no reconoció las acusaciones en su contra y mencionó que son afirmaciones no comprobadas por parte de la oposición peruana.
He remitido al Congreso el original de esta carta, que he transmitido al Perú, renunciando al cargo de Presidente Constitucional de la República. pic.twitter.com/PHX6ZccU9r
— PedroPablo Kuczynski (@ppkamigo) March 21, 2018
Sin embargo, en México, a pesar de que en diciembre pasado la agencia Mexicanos Contra la Corrupción hiciera públicos testimonios de diversos funcionarios del emporio de hidrocarburos en los que indicaban las transferencias de dinero a cambio de licitaciones de obra y favores, el pasado 6 de diciembre la bancada del PRI congeló la propuesta de Rocío Nahle para investigar exhaustivamente los nexos entre Odebrecht y Pémex.
“Acompañamos de tiempo toda la campaña del PRI, del partido PRI, y del actual presidente, Enrique Peña Nieto. No sólo de él, sino también de su equipo”, indicó Carlos Fadigas, ex titular de Braskern, empresa filial de Odebrecht.
Sin embargo, Lozoya Austin ha negado las acusaciones en su contra, argumentando que las imputaciones carecen de prueba documental alguna y relata una historia absolutamente falsa.