Durante el primer semestre del año la entidad más afectada del país por la caída de participaciones –es decir, los recursos federales que se entregan a las entidades federativas y sus municipios con el fin de compensarles su aportación a la economía del país– fue el Estado de México, con el monto más alto entre los recursos programados y los que realmente recibió. La caída fue del 7.2 por ciento que representan 4 mil 803.3 millones de pesos.
El reporte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) indica que a nivel nacional, el monto de participaciones distribuidas entre las 32 entidades, entre los meses de enero y junio, ascendió a 455 mil 108.2 millones de pesos, cuando calendarizaron 494 mil 948.6 millones.
La caída de 39 mil 840.4 millones de pesos lo resintieron 31 de las 32 entidades con bajas en sus ingresos; la única que no resultó afectada fue Colima, que logró acrecentar esta entrada en 2.8 por ciento, al tener 91.5 millones de pesos extras a lo que habían proyectado entregarle en estos seis meses.
El resto del país resultó afectado con caídas de hasta un 12 por ciento, como fue el caso de Nayarit, que porcentualmente tuvo el impacto más desfavorable; en contraste está el caso de Veracruz con sólo menos 0.2 por ciento de lo que se había proyectado.
Nominalmente, el Estado de México fue el que más recursos perdió en esta primera mitad del año al pasar de 66 mil 479.3 a 61 mil 676 millones de pesos, es decir 4 mil 803.3 millones que no entraron a sus cuentas y los cuales equivalen al 7.2 por ciento de la cifra calendarizada por la misma Secretaría de Hacienda que el gobierno estatal contempló en su presupuesto de ingresos y egresos.
La Ciudad de México perdió una cantidad muy similar, de 4 mil 705.3 millones, sólo que como la cantidad que se le entrega normalmente es menor a la de la entidad mexiquense su impacto porcentual es mayor, de 9 puntos porcentuales.
En total fueron 11 entidades las que resintieron esta caída en las proyecciones: Coahuila, Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Nuevo León, Puebla, Sonora y Tamaulipas. Ellas representaron el 55 por ciento de la diferencia registrada a nivel nacional.
En aportaciones la baja nacional es menor, de sólo un 3.4 por ciento, pues se consideró repartir entre las entidades 400 mil 710.2 millones, pero sólo pudieron pagar 387 mil 218.2 millones, es decir 13 mil 429 millones que no alcanzaron a repartir.
En este caso sólo seis entidades registraron una merma, entre las cuales está el Estado de México con una diferencia de apenas 57.5 millones, es decir de 0.1 por ciento, al pasar de 40 mil 227.1 a 40 mil 284.7 millones de pesos.
Comparativo 2019 Vs. 2020
Si se comparan las aportaciones pagadas este primer semestre contra las del mismo periodo de 2019 hubo un crecimiento de un punto porcentual, es decir, de 15 mil 530.5 millones que hizo pasar al país de 371 mil 750.7 a 387 mil 281.2 millones de pesos.
En este caso el Estado de México tuvo un crecimiento de 2 mil 20.5 millones, que equivale a 2.1 puntos porcentuales al pasar de 38 mil 264.2 a 40 mil 284.7 millones de pesos. De hecho fue la entidad con mayor crecimiento, y le siguió la Ciudad de México con mil 896.4 millones más y Chiapas con mil 411.5 millones.
En participaciones el comparativo entre lo pagado de enero a junio de 2020 contra el mismo lapso de 2019 fue negativo en 7.4 puntos. La SHyCP pagó 476 mil 749.3 millones el año pasado y este sólo 455 mil 108.2 millones, lo cual refleja una diferencia de 21 mil 641.1 millones.
Sólo Baja California, Colima y Quintana Roo tuvieron crecimiento; el resto obtuvo menos recursos de hasta un 18.5 por ciento, como fue el caso de Campeche, con el monto más alto, pero además con niveles superiores a los 10 puntos: Coahuila, Guanajuato, Hidalgo, México, Morelos, Nayarit y Puebla.
El Estado de México se fue 11.5 puntos porcentuales abajo, que representaron una caída de 5 mil 881.9 millones.
Los primeros seis meses del 2019 obtuvo 67 mil 557.9 millones, pero este 2020, con la pandemia y la caída de la recaudación fue de sólo 61 mil 676 millones de pesos, con los cuales debe afrontar lo mismo del año pasado, pero además el incremento de gastos por el aumento de precios e incremento salarial, aunado en esta ocasión a los estragos del covid-19.