En respuesta al amago de un paro de labores por parte de los trabajadores del Poder Judicial en protesta por el recorte de 15 mil millones de fideicomisos a este poder por parte de la Cámara de Diputados, el presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su postura enérgica. Durante una conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, declaró:
«Si dicen, por ejemplo, ‘vamos a hacer un paro’, pero si se van de vacaciones no sé cuánto tiempo, si no trabajan. Se tardan, bueno hay miles de personas que tienen 10 años sin sentencia.»
Además, añadió: «Van a hacer, dicen a hacer huelga de brazos cruzados si siempre están.»
Estas declaraciones han generado una discusión intensa sobre la dinámica laboral y la eficiencia dentro del Poder Judicial, poniendo en tela de juicio la productividad y el impacto en la prontitud de la administración de justicia.