El estruendo de los cañones, el ruido de las espadas y el grito de «muera Francia» se hizo presente de nuevo en las calles de la colonia Concepción Coatipac, en Calimaya. Los vecinos conmemoraron la Batalla de Puebla.
Don Justino Rojas, de 70 años de edad, representa a Ignacio Zaragoza desde hace 30 años. Este es uno de los personajes principales de la Batalla de Puebla, acontecimiento histórico que lleva más de 100 años siendo parte de las tradiciones de la Calimaya.
«Todos estamos contentos. No hemos dejado caer esta tradición. Ahora sí le echaron doble ganas para que más puedan participar».
Te recomendamos: Conmemoran Batalla de Puebla en Rayón
Este año, el contingente de 50 personas estuvo integrado principalmente por jóvenes, quienes dicen sentirse orgullosos de una tradición que ha puesto en alto a Calimaya.
«Es padre, uno se divierte pero además es algo que representa a Calimaya y que ha puesto al municipio en alto. Se habla de esta lucha en otros estados e incluso internacionalmente porque han venido de otros lugares fuera de México a entrevistarnos», detalló Francisco.
Familias completas participan en esta tradición. / Fotos: Claudia García
Una tradición generacional
Don Justino explica que los participantes pertenecen a familias que han sido parte de la representación de la Batalla de Puebla de generación en generación.
«Me da mucho gusto, principalmente con los niños, son a quienes vamos jalando y metiendo para no dejar caer esto. Por eso, animamos a los niños ya que hay muchas generaciones que no le ponen sentido a lo que inicia en el pueblito».
Familias completas participan en la representación de la Batalla de Puebla en Calimaya. / Fotos: Claudia García
La señora Enriqueta Rodríguez es una de las pocas mujeres que desde hace siete años es parte del contingente del ejército mexicano. Con machete en mano ella resalta la participación del sexo femenino en aquellos años. Por su parte, los tres hijos de la señora Enriqueta participaron como soldados del ejército Francés.
«Me gusta esta representación, tenemos que animar a los niños, nietos y todos ya que es una tradición que representa a nuestro país».
En puertas, azoteas y ventanas, se podía ver a la gente que salía para poder presenciar un año más la Batalla de Puebla.