La crisis política en Tecámac expone la fractura entre el grupo Mexiquenses de Corazón y el bloque delfinista. La alcaldesa Rosi Wong se desmarca de su antigua líder Mariela Gutiérrez y desplaza a sus cuadros de áreas estratégicas, desatando tensiones laborales y un abierto desafío del Cabildo.
El Ayuntamiento de Tecámac atraviesa un conflicto político que expone, con claridad inusual, la fractura entre Mexiquenses de Corazón —el grupo fundado por Higinio Martínez— y el bloque alineado con la gobernadora Delfina Gómez. La alcaldesa Rosa Yolanda Wong Romero, formada originalmente bajo el cobijo de Mariela Gutiérrez, ha tomado distancia de su antigua madrina política y ha desplazado a varios de sus leales en puestos clave del Gobierno Municipal.
La ruptura se hizo visible el 1 de diciembre, cuando cerca de 50 extrabajadores instalaron un plantón frente al palacio municipal, denunciando despidos injustificados a días de recibir su aguinaldo y finiquito. Aunque la alcaldesa niega que se trate de despedidos, el episodio aceleró tensiones que venían gestándose desde semanas atrás.


La postura de la alcaldesa
En entrevista con el periodista Osvaldo Müller, Rosi Wong insistió en que en Tecámac “no hay ingobernabilidad” y aseguró que no hubo despidos, sino “pérdida de confianza” hacia ciertos funcionarios.
“No los hemos despedido injustificadamente. Estamos totalmente apegados a la ley. Se les va a pagar hasta el último centavo de su finiquito”, afirmó.
La alcaldesa añadió que la última quincena de noviembre sí fue pagada y recordó que el aguinaldo aún no llega a su fecha obligatoria. También reveló que pidió la renuncia del secretario del Ayuntamiento y de la tesorera por decisiones tomadas sin su conocimiento. Ambos funcionarios —cercanos a Mariela Gutiérrez— se negaron a dejar el cargo.

Así mismo, rechazó las versiones que afirman que el municipio está entregándose al PRIAN. “Son personas afines a la Cuarta Transformación”, dijo.

El quiebre con Mariela Gutiérrez
Wong inició su trayectoria política bajo el ala de Mexiquenses de Corazón, el mismo grupo al que pertenece la senadora Mariela Gutiérrez Escalante y que durante años fungió como su principal sostén político en Tecámac.
Sin embargo, la alcaldesa ha dado un giro evidente: se ha alineado con la gobernadora Delfina Gómez y con el bloque delfinista.



Ese viraje tuvo un efecto inmediato: cuadros identificados con Mariela perdieron posiciones estratégicas y la alcaldesa comenzó a recomponer su gabinete con perfiles propios. La relación entre ambas —antes estrecha— hoy está claramente rota.

El Cabildo se planta
El distanciamiento detonó un choque institucional. Durante la Décima Quinta Sesión Extraordinaria de Cabildo, la mayoría de regidores rechazaron las propuestas de Wong para sustituir al secretario del Ayuntamiento y a la tesorera.
La votación fue contundente: siete en contra, cinco a favor y tres abstenciones.

Regidores de Morena encabezaron la negativa, argumentando que la remoción de los funcionarios no siguió un proceso administrativo válido y que los perfiles propuestos no garantizaban transparencia ni solvencia.
La sesión fue presidida por el regidor priista Carlos Orozco debido a la ausencia de la alcaldesa, lo que intensificó la tensión.
Marco legal
La Ley Orgánica Municipal del Estado de México establece que la alcaldesa propone y el Cabildo aprueba mediante mayoría absoluta. Sin ese aval, ningún nombramiento puede concretarse. Rechazada la propuesta, debe enviarse un nuevo perfil mientras se nombra un encargado de despacho.
Un municipio partido
El caso Tecámac revela algo mayor que un conflicto laboral. Deja ver:
- La confrontación abierta entre Mexiquenses de Corazón y el delfinismo.
- La ruptura definitiva entre Wong y Mariela Gutiérrez.
- Un Cabildo dividido capaz de frenar los movimientos de la alcaldía.
- Un plantón que es también un síntoma político.
Mientras la alcaldesa insiste en que no hay crisis, el municipio opera entre fracturas, desconfianza y un reacomodo que definirá el rumbo local en los próximos meses.




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