La autopista La Marquesa-Lerma, se ha convertido en uno de los tramos carreteros más peligrosos; la razón de ello, es su mala planeación y su trazo geométrico.
Arturo Chavarría Sánchez, presidente del Colegio de Arquitectos y Urbanistas del Estado de México, expone que no basta con limitar la circulación de transportes de carga – como anunciara la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) -, sino suspender su operación.
“Este tramo, la forma en que se proyectó, cómo se construyó y cuáles son los elementos de seguridad implementados, requieren de un análisis a fondo, debería estar sujeto a una auditoria externa que revise el diseño completo”, señala el especialista.
Este tramo, construido y operado por la empresa Pinfra, forma parte de la autopista México-Toluca. Se inauguró el 20 de julio del 2016 y para su construcción, que abarca 12 kilómetros, se talaron más de 37 mil árboles.
El costo de este tramo, fue de 3 mil 700 millones de pesos, donde ya perdieron la vida 6 personas y dejó, al menos, 12 lesionados en sólo un mes.
Chavarría Sánchez insistió que debería suspenderse su funcionamiento en forma total, a efecto de que se hagan peritajes del diseño del proyecto carretero y, además, dar vista al Ministerio Público para proceder contra quien resulte responsable, no sólo de la construcción y operación, sino de quien “haya autorizado esta autopista de la muerte”.
El especialista señala que el principal problema es que el tramo en cita fue trazado no sólo replicando la pendiente de la autopista de cuota México-Toluca, sino que la acentuó, por lo cual omitieron curvas para evitar que la aceleración se incrementara.
Limitar el tránsito de los camiones de carga en la nueva autopista no resolverá el problema, pues ahora los accidentes ocurrirán en la autopista libre y en la normal de cuota México-Toluca; lo que se requiere es un cambio total de tecnologías en la forma de construir, trazar y operar las carreteras, ya que el modelo actual está desfasado por varias décadas.
“Es impostergable que se revisen aspectos como planimetría, acotamientos, pendientes y derechos de vía, y sin temor a equivocarme, se requerirán enormes inversiones para rellenar las pendientes”, señala.
Tribasa, Pinfra y los Peñaloza
Grupo Tribasa emergió de la nada durante el mandato de Carlos Salinas de Gortari. David Peñaloza Sandoval era la cabeza visible, el hombre que manejaba todo, el que daba la cara.
Pero los malos manejos fueron motivo para que Peñaloza Sandoval fuera detenido en 2002 en España por elementos de la Interpol, luego de varios meses de ser perseguido tras ser acusado de un fraude por 29 millones 500 mil dólares en agravio de Nacional Financiera.
Años después, bajo el amparo de los gobiernos panistas y priístas, todo cambió. En el 2006, Grupo Tribasa se convirtió en Promotora y Operadora de Infraestructura (Pinfra), a cuyo cargo quedó David Peñaloza Alanís.
La constructora Pinfra ha gozado del favoritismo de las administraciones federales en turno y hoy es una empresa con finanzas sanas a costa del erario.
Mientras su empresa, Pinfra, opera la autopista más cara en el país, la México-Toluca, con un costo por kilómetro de 3.45 pesos, contra los 2 pesos promedio para el resto, Peñaloza Alanís ingresó, en el 2015, cuando contaba con 41 años de edad, a la lista de millonarios de Forbes.
Para saber:
– Un camión de carga perdió los frenos y se llevó dos vehículos compactos en la zona de casetas de cobro a la altura de “Río Hondito”, en dirección a la capital mexiquense, dejando un saldo de cuatro muertos y cinco lesionados.
– Un camión que transportaba varilla perdió el control y se llevó a otra camioneta y trabajadores que laboraban en la caseta, dejando un saldo de siete lesionados.
– Un tráiler perdió los frenos y volcó en la misma zona, provocando una explosión y un incendio, por lo que el conductor murió calcinado.