Los niños mexicanos parcen no ser prioridad en la agenda legislativa pues la Comisión de los Derechos de la Niñez de la Cámara de Diputados en año y medio apenas ha aprobado 8 iniciativas de 65 que se han presentado desde 2015, lo que equivale a una iniciativa cada 75 días, volviéndola de los órganos legislativos menos productivos de la cámara baja.
Entre las iniciativas “pendientes” se encuentran las siguientes:
-Derecho de los niños a la enseñanza y uso de lenguas extranjeras.
-Protección a los menores en situación de vulnerabilidad por haber nacido o vivir en centros penitenciarios con su madre.
-Derecho de los niños de comunidades indígenas por acceder a educación bilingüe e intercultural.
Las anteriores iniciativas son solo algunos temas que han quedado para la posterioridad sin que se retomen o se enfatice en los mismos lo que confirma, una vez más, que en definitiva los niños no son prioridad para los políticos mexicanos.
Al intentar consultar la página del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), programa diseñado para coordinar entre la Federación, estados y municipios la implementación de políticas públicas con perspectiva de los derechos humanos para la infancia y adolescencia; cuya intención es canalizar la atención de leyes, normas y presupuesto para este sector, simplemente no se le encuentran modificaciones ni actualizaciones desde el 5 de diciembre del año 2015.
Una leyenda, que aparece en la parte superior de esta página, justifica la falta de contenido a través de la siguiente leyenda: “Este contenido será modificado temporalmente en atención a las disposiciones legales y normativas en materia electoral, con motivo del inicio de periodo de campaña”.
SIPINNA sería el más reciente esfuerzo de la clase política por promover un mecanismo protector de los derechos a los infantes; sin embargo, como es prioridad en la agenda política el tema de las elecciones, no se le ha dado continuidad a estos reiterando la falta de compromiso de la clase política mexicana hacia este sector vulnerable.
Actualmente México tiene una población de 40 millones de niños y adolescentes menores a 18 años de los cuales, de acuerdo con la UNICEF en un estudio de 2014, un 21.4% vive en situación de pobreza y de estos 4.6 millones en pobreza extrema.
Un año después, en 2015, el Instituto Nacional de Salud Pública, a través de la Encuesta Nacional de Niños, Niñas y Mujeres reveló que el 63% de los niños de entre 1 a 14 años han experimentado una agresión psicológica y/o castigo físico.
12% de entre 5 y 17 años de edad afirmaron que ya han trabajado de los cuales el 8% de éstos lo hace bajo situaciones de peligro.
Un 17% de las mujeres entre 15 y 19 años de edad han sido madres y este porcentaje aumenta por encima del 20% entre quienes viven en zonas rurales.
Se confirma la hipótesis: el tema de los derechos de los niños y adolescentes no es prioridad para los políticos mexicanos.