Adiestramiento canofilo, proceso de comunicación, diversos tipos de equipamiento y la experiencia de poder estar lo más cerca posible de un tanque de guerra, fueron parte del paseo dominical por el campo militar llevado a cabo durante esta mañana.
Cientos de habitantes provenientes -en su mayoría- de Tenango, Mexicaltzingo, Metepec y Toluca, aprovecharon del caluroso clima y el último fin de semana de vacaciones para pasar un rato agradable con los militares y aprender sobre la vida diaria de un soldado en sus diversos rangos.
Según lo comentado por los militares, esta práctica se llevó a cabo para llevar una dinámica familiar y que al mismo tiempo se conozca el trabajo que se hace por una ciudadanía más segura y demostrar a la sociedad (principalmente a los niños) que los soldados no son seres “gruñones” como se cree, sino que están para servir a la gente.
La zona militar abrió sus puertas desde las 8:00 de la mañana y a ritmo de lo último en reggaetón dieron la bienvenida a los visitantes para comenzar su travesía por el andador de esta Zona Militar 22-A hubicada en la carretera Toluca-Tenango.
Cada estación del andador mostraba desde el equipo hasta las técnicas de trabajo, explicadas por los mismos militares, por ejemplo, el adiestramiento canofilo, explica la manera en cómo se trabaja con los canes para detectar bombas o sustancias nocivas para la salud, así como los métodos de ataque de este animal considerado como el mejor amigo del hombre.
La estación de transmisión, que también fue una de las más recurridas por las familias presentes, mostraba los métodos de comunicación como el clave morse y el uso de radios de largo alcance.
El último punto de este recorrido, tenía como atracción los camiones, carros y un tanque de este ejército mexicano, donde la gente podía subirse y tomarse fotos, así como uniformarse con los equipos militares para sentir la experiencia de ser militares por un día.
Finalmente, los campos de recreación de esta unidad inmueble, también estaban disponibles para el uso familiar mientras muchos otros decidieron solo sentarse bajo un árbol para descansar y recuperarse del largo andador y el sofocante sol de esta mañana.
Por su parte, los militares también aprovecharon este día para estar con sus seres queridos sin problema alguno y disfrutar un momento en familia, como desde mucho tiempo no lo hacían, pues comentaron que no se tiene la oportunidad de estar con sus seres queridos por largas temporadas que van desde los ocho días, hasta el mes sin verlos.
Mientras se veía a los soldados disfrutando de sus familias, otros tantos continuaron solos por la lejanía de sus hogares por lo que les es difícil traer a alguien a este campo militar.
Síguenos