De acuerdo con la denuncia de colectivos y organizaciones, cerca de las 9 de la noche del domingo 18 de octubre, la activista y defensora de los pueblos indígenas Kenia Inés Hernández Montalván fue detenida ilegalmente y con violencia en la caseta de peaje de Amozoc, en Puebla, lo que derivo en una intensa búsqueda y denuncia de desaparición forzada.
Tras permanecer en paradero desconocido y sin que se le informara sobre su situación durante varias horas, trascendió que fue trasladada al penal de Almoloya de Juárez, Estado de México, así lo anuncio en un comunicado la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM).
El comunicado precisa que hasta el momento la activista todavía no ha sido presentada ante las instancias de justicia, lo que supone una violación de sus garantías judiciales.
Por su parte el Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero también anunció esta tarde la localización de Kenia Hernández y publicó un video en el que se denuncian las condiciones en las que se habría dado la detención.
«Hemos localizado a la defensora #KeniaHernandez, en lo general se encuentra bien y mañana estaremos presentes en la primer audiencia de esta nueva acusación fabricada».
Esta es la segunda detención que sufre Kenia Hernández en los últimos cuatros meses, pues permaneció detenida del 6 al 11 de junio en el penal de Chiconautla en Ecatepec, cuando la jueza le concedió seguir con su proceso penal en libertad, tras haber sido acusada de un supuesto robo con violencia de 500 pesos.
Lee: Por presunto robo de $500 vinculan a proceso a Kenia Hernández
De acuerdo con la RNDDHM, Kenia Hernández es oficial de las Policías Comunitarias de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias en el Estado de Guerrero, partícipe del Movimiento por la Libertad de los Presos Políticos y en el Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Violaciones Graves a Derechos Humanos y miembro de la Dirección Política Nacional de Encuentro Nacional por la Unidad del Pueblo Mexicano y dirigente del Colectivo Libertario Zapata Vive.