Toluca, Méx.- Israfil Filós Real, representante del Consejo para la Diversidad Sexual del Estado de México aseguró que a partir de las protestas encabezadas por los grupos católicos, mormones y de otros credos, así como civiles, en contra de los matrimonios igualitarios incrementó hasta en 30 por ciento el número de ataques a personas de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI).
Refirió que las marchas y protestas se convirtieron en un motivo para que mujeres y hombres no heterosexuales se conviertan en las víctimas de las agresiones físicas y verbales por parte de personas que se consideran facultados para señalar o juzgar la forma de vida de otros.
“La iglesia tomó de rehén a la comunidad LGBTTTI con la finalidad de emprender una batalla contra el gobierno, y recuperar los espacios para incluir en la democracia y la vida polìtica de Mèxico, pero eso ya no es legal desde hace muchos años, y lo que no hemos identificado es que permitir su reingreso, es similar a retroceder muchos años”.
Enfatizó que acudir a la Legislatura mexiquense este sábado no fue con el interés de enfrentarse o retar a los grupos en su contra, sino para entregar una petición “justa” que únicamente versa en el cumplimiento de los mandatos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que ya falló a su favor desde hace más de un año.
“Es un acto retrógrada que a pesar de haber pasado ya un periodo legislativo con esta propuesta enviada por parte del Ejecutivo estatal, Eruviel Ávila Villegas para reformar el Código Civil, hasta el momento mantengan en la congeladora el tema, con la finalidad de dejar pasar el tiempo hasta que se nos olvide o lo pasemos por alto”.
Dijo que se trata de los derechos de las personas, que deben ser iguales para todos, porque no hay ciudadanos de primera y de segunda, sino todos son mexicanos.