Caso Odebrecht, tan sucio como la Casa Blanca

Lava Jato, la mayor red de corrupción en América Latina ha salpicado a México. A través de transferencias de dinero por licitaciones de obra y “favores”, la empresa de hidrocarburos destinó dinero a dos empresas de Emilio Lozoya Austin durante la campaña de Peña Nieto y una vez en el poder, siendo Lozoya director de […]

Lava Jato, la mayor red de corrupción en América Latina ha salpicado a México. A través de transferencias de dinero por licitaciones de obra y “favores”, la empresa de hidrocarburos destinó dinero a dos empresas de Emilio Lozoya Austin durante la campaña de Peña Nieto y una vez en el poder, siendo Lozoya director de Petróleos Mexicanos.

A través de la empresa Braskem, la filial petroquímica de Odebrecht, la trasnacional “acompañó de tiempo completo” la campaña de Enrique Peña Nieto. De acuerdo con investigación de Mexicanos Unidos contra la Corrupción, el ex director en 2012 de la filial brasileña indicó el vínculo estrecho entre la empresa y el equipo de campaña de Peña.

“Acompañamos de tiempo completo toda la campaña del PRI, del partido PRI, y del actual presidente, Enrique Peña Nieto. No sólo de él, sino también de su equipo”, indicó Carlos Fadigas, ex titular de Braskem en una reunión con inversionistas en 2013, recopilada en una investigación de Mexicanos Unidos Contra la Corrupción.

El enlace entre Odebrecht y Peña fue Emilio Lozoya Austin, a pesar de que él en todo momento ha negado las acusaciones en su contra, argumentando que las imputaciones en su contra “carece[n] de prueba documental alguna y relata una historia absolutamente falsa”.

Pero las pruebas vieron la luz en una serie de videos publicados por la agencia Quinto Elemento Lab, en los juicios a ex ejecutivos de la empresa Odebrecht por los delitos de corrupción, en el Anexo Temático 19, “Presidente de Pémex”. Y las pruebas cayeron como una cascada a través de cuatro videos, en cada uno se hacía patente la red de sobornos en los que Emilio utilizó a Petróleos Mexicanos para su beneficio personal, y para el de su amigo, el presidente Peña Nieto.

En el primero de ellos, Luis Alberto de Meneses Weyll, ex director de Odebrecht México, indicó que entregó sobornos por 10 millones de dólares a Lozoya para que Pémex le entregara la concesión para la construcción de una refinería en el estado de Hidalgo, con un valor de 115 millones de dólares.

Meneses especificó que transfirió 3 millones 140 mil dólares a dos empresas offshore vinculadas con Lozoya: Latin America Asia Holding y Zacapan, establecidas en las Islas Vírgenes en el Caribe.

En el segundo video, Meneses Weyll especificó que Lozoya Austin se reunió con Hilberto Silva, titular del Departamento de Operaciones Estructurales de Odebrecht, sector que se encargaba de realizar los pagos ilícitos a los gobiernos para que se les otorgaran concesiones de obra pública.

En la tercera entrega, Hildeberto Mascarenhas Alves da Silva indicó que Lozoya Austin utilizó a Rodrigo Durán como prestanombres, quien depositó el dinero en cuentas bancarias de HSBC en el principado de Mónaco. “Rodrigo transfirió las acciones de la offshore de la cuenta en donde  fue depositado el dinero. En cualquier momento, Emilio podía decir esa offshore es mía y esa cuenta es mía, si en algún momento hubiera un malentendido entre Rodrigo y él”.

Hoy salió a la luz el video del ex presidente de Odebrecht para América Latina y Angola, Luiz Antonio Mameri, en el que indicó que él autorizó las transacciones a Emilio Lozoya, por “…contrapartida a las acciones realizadas por Emilio Lozoya en el sentido de apoyar a la compañía en las operaciones en México, facilitando de forma general una aproximación con el empresariado local… autoricé mediante correos electrónicos encriptados en ese sistema que hoy se denomina My Web Day, que se realizara ese pago. Fue procesado por el equipo de Operaciones Estructuradas”.