El desabasto de medicamentos en el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM) continúa y ha costado la vida de personas, como la de la mamá de Gloria González, afiliada a la Unión de Pensionados y Pensionistas.
“Hace dos años ya, la llevé a consulta, no me dieron los medicamentos, me dieron vales. Le dije al médico que necesitábamos análisis, me dijeron que no”. De acuerdo con Gloria, la muerte de su madre pudo haber sido evitada con la correcta atención por parte de las autoridades del ISSEMyM.
“Después de eso sufrió una caída, voy a urgencias del ISSEMyM, la atienden a las mil horas y le dan nada más analgésicos para el golpe, para eso mi mamá empeoraba… Los medicamentos se los dábamos, no teníamos dinero para análisis particulares, ella empeora y empieza a orinar sangre, la llevamos nuevamente y nos dicen que es el problema del golpe«.
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Luego de que se deteriorara la salud de su madre, Gloria insistió en la aplicación de un análisis cuyo diagnóstico fue insuficiencia renal. Los resultados llegaron tarde y tres días después, su mamá murió. Gloria explicó que los medicamentos y los análisis representaban un gasto de más de 3 mil pesos que se encontraban fuera de su alcance.
Derechohabientes esperando su turno en la farmacia del ISSEMyM / Foto: Victor Castillo
El desabasto y la atención médica no han mejorado, Gloria padece diabetes y afirma que ha tenido que esperar hasta 2 meses para obtener su medicamento, por lo que en ocasiones tiene que desembolsar mil 500 pesos para adquirirlos.
Con la atención especializada pasa lo mismo: “yo he tenido que ir mejor a la clínica del Insabi que está en Lago Caimanero, ahí me he ido a checar los dientes. En el ISSEMyM llevo 3 años esperando una cita de medicina interna”.
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Recientemente, un golpe en el ojo la llevó a buscar atención médica, pero le informaron que su clínica no cuenta con oftalmólogo; por eso acudió con un médico particular quien le informó que tiene desprendimiento de cristalino. “Me da mucha impotencia”, finaliza Gloria quien tendrá que sortear su tratamiento con sus recursos, pese a haber destinado parte de su salario al pago de las cuotas de esta institución.