A silbidos y con conos de plástico, un policía municipal desvía el tráfico, principalmente al transporte público, es una de las medidas que las autoridades tomaron ante la fisura que se presentó desde la semana pasada sobre la calle de Lerdo al cruce con Quintana Roo que obligó a cerrar el carril de extrema izquierda, el operativo de restricción del tráfico en los últimos días se extendió hasta las calles de Juárez y Gómez Farías.
Al ser cuestionado, el uniformado municipal de manera anónima señaló, «Es que se está hundiendo la ciudad de Toluca, por eso está cerrado el paso a los camiones»; «Va para largo a mí me ordenaron desviar el tránsito por dos meses», dijo. Las autoridades de Agua y Saneamiento de Toluca, estimaron que los trabajos de reparación eran de 4 semanas.
El pasado 29 de septiembre, Alfa Diario informó de la una grieta aproximadamente de 20 metros de longitud que obligó a cercar provisionalmente un carril de la calle de Lerdo al cruce con Quintana Roo, en pleno Centro Histórico de Toluca. La grieta surgió por una ruptura de tubería frente a la vieja harinera conocida como «El Molino», inmueble donde actualmente se construye el complejo de lujo «Paseo Molino».