Personal del Centro Médico Adolfo López Mateos teme que ocurra un brote de COVID-19 en el hospital, ya que no se han seguido los protocolos sanitarios, así lo denunciaron el día de ayer, en una entrevista para nuestro diario. Opinan que puede suceder algo similar a lo acontecido en Monclova, donde entre personal médico y administrativo del Hospital General Regional núm. 7, adscrito al Instituto Mexicano del Seguro Social, suman más de 30 casos por infección intrahospitalaria.
“Ingresan pacientes, dicen que son positivos, después que negativos o que son negativos y después positivos”, refiere una enfermera de la unidad de terapia intensiva, quien prefirió dejar su nombre en el anonimato. Ella narra que los traslados, de un piso a otro, han generado incertidumbre al interior del hospital. Los propios médicos y enfermeras han manifestado su preocupación por los casos que, dicen, las autoridades esconden.
Personal sanitario del hospital asegura que el día de ayer, 8 de abril, el paciente de la cama 321 del centro médico Adolfo López Mateos, diagnosticado con un choque cardiogénico e insuficiencia cardíaca, fue trasladado al cuarto piso, destinado a pacientes sospechosos y confirmados con COVID-19, sin utilizar una burbuja de traslado, burbujas con las que si cuenta el hospital, pues fue el propio personal quien las donó. Es decir, dicho paciente fue trasladado de un piso a otro sin mayores medidas de seguridad, algo que no es la primera vez que sucede, refiere el personal médico. En otras palabras, no es la primera vez que se expone la salud de los pacientes y la del personal sanitario dentro de este centro de alta especialidad médica.
El Centro Médico Adolfo López Mateos ha sido uno de los hospitales elegidos por el Instituto de Salud del Estado de México para atender pacientes con COVID-19; su cuarto piso ha sido habilitado como unidad de terapia intensiva y cuenta con 46 camas. Sin embargo, en el resto del hospital se continúan brindando servicios de alta especialidad que atienden a pacientes con hepatitis, VIH y tuberculosis, por mencionar algunas condiciones.
Autoridades de este centro médico han aclarado que no se entregará equipo especializado a todo el personal, al considerarlo no necesario; sin embargo, el traslado del paciente de la cama 321 demuestra la exposición que enfrentan los trabajadores
Al igual que en el hospital General Regional núm. 72, ubicado en Tlalnepantla, el personal del Centro Médico Adolfo López Mateos se manifestó, en días pasados, por la falta de insumos para hacer frente a esta pandemia. Es más, fue hasta el pasado viernes 3 de abril cuando confirmaron haber recibido trajes Tyvek, gogles y caretas para el personal de la unidad de terapia intensiva. De acuerdo con información obtenida por este medio, estos insumos no se entregaron a todo el personal que labora en el cuarto piso, área designada para pacientes COVID: en el resto del hospital el equipamiento es el usual.
Este miércoles el director del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo, confirmó que 20 personas del personal de salud dieron positivo a la prueba por COVID-19 en el hospital de Tlalnepantla, en conferencia de prensa rechazó que se tratara de un brote hospitalario, como el ocurrido en Monclova, donde hasta ahora se contabilizan 3 muertes y más de 30 contagios; en Cabo San Lucas, Baja California, son 42 los casos confirmados de COVID-19 entre el personal sanitario.
En diferentes reuniones, las autoridades de este hospital de alta especialidad han aclarado que no se entregará equipo especializado a todo el personal, al considerarlo no necesario; sin embargo, el traslado del paciente de la cama 321 demuestra la exposición innecesaria que enfrentan los trabajadores de esta institución, quienes, en más de una ocasión, han denunciado la mala calidad del equipo entregado. A pesar de enfrentar una emergencia sanitaria, el personal de la salud que labora en este centro médico continúa adquiriendo su propio equipo.
Antes estas irregularidades, el personal médico no ha descartado la posibilidad de volver a manifestarse debido a las condiciones en las cuales debe laborar, el aislamiento voluntario para proteger al personal vulnerable al COVID-19, también ha dejado una deficiencia de personal importante en este hospital.