Toluca, México; 25 de julio de 2018. La Agencia Espacial Italiana anunció el miércoles que los investigadores han detectado signos de un cuerpo grande y estable de agua líquida encerrada bajo una profunda capa de hielo, cerca del polo sur de Marte. Las observaciones fueron registradas por el Radar Avanzado para el Subsuelo y el insturmento de Sondeo de Ionosfera de Marte o “Marsis”, para abreviar.
"Marsis nació para hacer este tipo de descubrimiento, y ahora lo tiene", dice Roberto Orosei, un radioastrónomo del Instituto Nacional de Astrofísica, que dirigió la investigación. Los hallazgos de su equipo, que aparecen en la edición de la revita Science de esta semana, plantean preguntas tentadoras sobre la geología del planeta y su potencial para albergar vida.
El conjunto de instrumentos recolectó su evidencia desde la órbita, volando a bordo de la nave espacial Mars Express de la Agencia Espacial Europea, que funciona mediante la transmisión de pulsos de ondas electromagnéticas de baja frecuencia hacia el planeta rojo. Algunas de esas ondas interactúan con las características en y debajo de la superficie marciana y reflejan hacia el instrumento, llevando pistas sobre la composición geológica del planeta.
Marsis pasa relativamente poco tiempo por encima de Planum Australe, el plano polar del sur de Marte y el foco de la investigación del equipo de Orosei. Por años, los investigadores solo podían escuchar ecos periódicamente, pero en mayo de 2012, después de una actualización de software que permitió a Marsis adquirir datos más detallados, los investigadores comenzaron a recopilar un registro más completo.
Tres años y medio, y 29 observaciones más tarde, consiguieron formar un mapa radiogramático del plano polar del sur de Marte que destacó, cuando hicieron una referencia cruzada de todas sus medidas, reflejos brillantes en las señales de radar, que corresponden a lo que Orosei ahora llama "una anomalía bien definida" a unos 12 kilómetros de ancho y varios metros de profundidad. La superficie de una capa de hielo tiende a reflejar las ondas de radar con más fuerza que las regiones debajo de ella, pero en pases múltiples Marsis había detectado ecos extraordinariamente fuertes que provenían de debajo del polo sur.
"No puedo probar que sea agua, pero estoy seguro de que no se me ocurre nada que se parezca a esta cosa y que no sea agua líquida", dice Richard Zurek, científico jefe de la Oficina del Programa de Marte en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. "Tal vez eso tiene que ver con la falta de imaginación de mi parte", agrega, "pero probablemente también tiene que ver con la escasez de datos". Más observaciones de radar, dice, podrían dar lugar a explicaciones que los científicos aún no han pensado, peor también podría arrojar más preguntas.
Expertos en biogeoquímica y microbiología de ambientes subglaciares aquí en la Tierra llevaron al primer equipo a descubrir la vida microbiana en un lago debajo de la capa de hielo de la Antártida Occidental. "Se necesitan tres cosas para la vida: agua líquida, una fuente de energía, como minerales de lixiviación – que sabemos que tiene Marte -, y una semilla biológica", dice. Es probable que el lago debajo del polo sur de Marte posea los dos primeros. En cuanto a toda la chispa de la vida, "no estoy seguro de que alguna vez sepamos de dónde viene la semilla", dice. Pero si la Tierra tiene una semilla, tal vez también Marte.