Toluca, Estado de México; 2 de mayo de 2019.-Aunque no mencionaron la palabra “pederastia”, ni se refirieron a los sacerdotes mexicanos que han incurrido en ese ilícito, los obispos de México volvieron a disculparse, escuetamente, por estos hechos.
“Por nuestra parte, hemos pedido y seguiremos pidiendo perdón. No le restamos gravedad al delito y hemos implementado diversas medidas, para evitar cualquier abuso y para protegerlos, -a los menores- medidas que seguiremos actualizando”.
En el marco de CVII Asamblea Plenaria, efectuada en la sede de la Conferencia del Episcopado Mexicano, en la que dieron a conocer el Proyecto Global de Pastoral 2031-2033, dijeron estar conscientes de los agravios cometidos contra niños y niñas en diversos ambientes familiares y sociales.
Al dar a conocer detalles de su proyecto pastoral, mencionaron –de acuerdo a su comunicado de prensa- que éste se va a centrar en cuatro ejes temáticos: jóvenes, protección de menores, formación del clero y migrantes.
En este último rubro se refirieron a las caravanas de personas que huyen de la miseria y de la inseguridad, y reiteraron su actitud “de Iglesia samaritana” que buscará ayudar a “los verdaderos migrantes”, al tiempo que esperan que se instrumente una política migratoria “sin ambigüedades ni ingenuidad, en pleno respeto de los derechos humanos”.
Destacaron que en esta temporada de Cuaresma, el Episcopado Mexicano hace suya las angustias que vive el país, debido a la violencia, la inseguridad, la pobreza, la inequidad, la incertidumbre política, el deterioro ambiental y la desigualdad social, entre otros aspectos.
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