La FES Cuautitlán de la Universidad Nacional Autónoma de México es un ejemplo de la aplicación de medidas neoliberales y «derechizadas», ya que los directivos del plantel ––que se desempeñaron en gobiernos de derecha–– han aplicado politicas mercantiles en la educación y procesos antidemocráticos.
La UNAM es un espacio educativo de gran importancia para el Edomex, ya que más de 86 mil mexiquenses están inscritos en 5 planteles, solo 27 mil estudiantes menos que en la UAEMex, cuya matrícula del 2020 registró 113 mil 834.
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La matrícula de la UNAM está distribuida en 4 planteles de Educación Superior ubicados en el Valle de México: FES Iztacala (Tlalnepantla), FES Cuautitlán, FES Aragón (Nezahualcóyotl), FES Acatlán (Naucalpan), y uno de educación medio superior: el Colegio de Ciencias y Humanidades de Naucalpan.
En ese contexto, tiene mayor resonancia la idea de una universidad derechizada y neoliberal, ya que las cúpulas ligadas a partidos políticos mantienen un control autoritario y violento para mantener intereses privados, según señalan alumnos de esta casa de estudios.
Además, los cinco planteles en la entidad mexiquense se convierten en pieza clave, pues casi una tercera parte de la matrícula nacional se concentra aquí.
FES Cuautitlán, una ventana al conflicto
Las críticas expresadas por López Obrador hacia la UNAM han reavivado los cuestionamientos que los movimientos estudiantiles de izquierda tienen desde hace años: el enfoque mercantil de la educación, la elitización, la precariedad laboral y una estructura antidemocrática.
“La universidad como lo plantea el presidente sí es neoliberal; pero también eso obedece a una política de estado. Nosotros planteamos, que si la universidad es neoliberal es porque el gobierno sigue permitiendo la política neoliberal. La muestra más clara de esto fue la Ley General de Educación Superior, donde prácticamente se mantiene la misma política”, señala Mario Mendoza, estudiante del posgrado de Ciencias Sociales y miembro del Comité Ejecutivo del Consejo de Representantes Estudiantiles de la Facultad de Estudios Superiores de Cuautitlán.
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Mario es parte de una de las organizaciones estudiantiles democráticas con mayor tradición y arraigo en la UNAM, pues funciona desde hace 45 años como “sindicato estudiantil”.
Fotos: redes sociales
En la actualidad mantiene logros que no se encuentran en otros planteles: dos comedores gestionados por estudiantes, un convenio con la Secretaría de Movilidad ––que brinda transporte seguro y a bajo costo–– y, recientemente, han abierto espacios democráticos entre docentes y alumnos, en donde se toman decisiones sobre apertura de grupos y asignación de horas.
Como organización se posicionaron frente a los planteamientos de López Obrador; afirmaron que sí existe el neoliberalismo y la derecha en la UNAM, pero también han llamado a que desde el gobierno federal se muestren reformas de ley que garanticen terminar con esto.
“¿No es usted quién prometió eliminar los exámenes de admisión y ahora han subido a rango de ley? ¿No se estableció en la constitución la gratuidad de la Educación Superior pero en la Ley General de Educación Superior se sigue manteniendo el enfoque de educación como servicio, da garantías a privados para seguir haciendo negocio, y sigue sin asignarse el presupuesto para garantizarse en los hechos dicha gratuidad?”, señala un pronunciamiento realizado frente a las declaraciones del presidente.
Origen de la Fes Cuautitlán
La FES Cuautitlán concentra 17 mil alumnos y es la primera unidad multidisciplinaria de la UNAM. El origen del centro académico tiene una visión cercana a la izquierda y la educación pública de carácter social, que hoy se mantiene en carreras como Medicina veterinaria e Ingeniería agrícola. El espacio educativo se construyó cuando el toluqueño Pablo González Casanova era rector.
Pese a sus antecedentes, la Fes Cuautitlán está lejos de las aspiraciones que González Casanova planteó en su proyecto universitario. En la actualidad el director del plantel es Jorge Alfredo Cuellar Ordaz, quien era Director General de Ganadería durante la gubernatura de Osorio Chong en el Estado de Hidalgo.
Alfredo Cuellar llegó a la dirección del plantel en 2013, cuando Osorio Chong fue secretario de Gobernación de Enrique Peña Nieto y se ha mantenido en el puesto por dos periodos consecutivos. Tiene el control de la institución con medidas que, incluso, salen de los lineamientos centrales de la UNAM y que reflejan la existencia de feudos políticos, explican los estudiantes organizados.
Durante su periodo, el Consejo de Representantes Estudiantiles ha denunciado distintos mecanismos implementados con fines privados. Uno de ellos son los diplomados que una empresa disfrazada de AC llamada Ibext consulting oferta.
De acuerdo con los estudiantes, la empresa es de profesores de administración de la FES y a través de su página ofrece cursos promovidos por la Secretaria de Educación Continua.
Fotos: redes sociales
De la misma manera se han expuesto casos como convenios en la Facultad de Química con Coca Cola, en donde se utilizan las instalaciones para investigación de la iniciativa privada.
La derecha en la UNAM
“En 2019, de manera cínica, una regidora del PAN ––Claudia Bravo–– estuvo impulsando un movimiento feminista en el campo 1 de la institución y se hizo una campaña muy fuerte contra la izquierda estudiantil, donde incluso llegamos a tener compañeros golpeados y lamentablemente en el Edomex la impunidad está a la orden del día, es un riesgo, acá protestar tiene mayores riesgos que en la Ciudad de México”, señala Mario Mendoza.
De acuerdo con el estudiante, este caso y la forma en que el director llegó a su puesto son solo un ejemplo de como se ha posicionado la derecha:
“[…] lo extraño sería una posición de izquierda en las cúpulas de la universidad; en la comunidad estudiantil y docente hay una historia de lucha estudiantil y sindical pero en la parte de la autoridad ––desde su fundación–– tiene un enfoque de derecha. Gómez Morín,[quien] fue fundador del PAN y opositor al cardenismo, así como Antonio Caso ––defensor del enfoque liberal de la universidad–– redactaron la Ley Orgánica”.
La organización estudiantil también señala esta situación en su posicionamiento, en el que buscan destacar la diferencia que existe entre la comunidad estudiantil y quienes están al frente de la UNAM.
“Podemos darnos cuenta que la Universidad es plural, que en ella coexisten las diferentes vertientes del pensamiento, pero hay una gran diferencia entre quienes controlan la universidad y quienes forman parte de ella, esa lista de ex rectores, son efectivamente, neoliberales, no su comunidad”.