Para mí el feminismo, como dice Simone de Beauvoir, es una manera de luchar colectivamente… pero le agregaría que también es una forma de crecer personalmente.
–Natali Ixchel
Una mujer destacada en el ámbito de la labor social por el gobierno del Estado de México recibió –a manos del gobernador Alfredo Del Mazo– el Premio Estatal de la Juventud 2022. Originaria de Atlacomulco de Fabela, Natali Ixchel puso en alto el nombre de su municipio y de su casa de estudios, la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex).
Natali es orgullosamente uaemita desde la preparatoria; ingresó al plantel Isidro Fabela Alfaro, en Atlacomulco –antes de que tuviera un nombre, según afirmó. Ahí descubrió que la universidad era el medio para desarrollarse en distintos ámbitos, como la oratoria, la escritura y la investigación.
A lo largo de su trayectoria, Natali ha buscado –principalmente desde la academia– impulsar la educación con perspectiva de género, a través de distintos medios, entre el que destaca el Taller de Metztli; una comunidad virtual que acoge a todas las ideologías e identidades de género para difundir los conocimientos de forma libre.
“Todas, todos y todes son bienvenidas, bienvenidos y bienvenides a trabajar con todas nosotras… damos talleres de manera gratuita para que todo esto sea posible”.
Premio Estatal de la Juventud
Desde la postulación al Premio Estatal de la Juventud, Natali visualizó un panorama complicado, pues, reconoce que aunque ella decidiera participar –por muy orgullosa de su trayectoria que esté– había cientos de jóvenes destacados en la misma situación.
No esperaba obtenerlo, fue la primera vez que participé, yo nunca lo había intentado en ninguna otra edición […]. Fue muy complicado incluso el aceptar que lo había ganado porque refleccionas: ‘ok, tú lo ganas, está tu nombre, vas a la ceremonia pero… ¿de quién es ese premio?’.
El reto: la consejería
Natali fue consejera universitaria titular cuando estudió en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAEMex y, aunque para ella fue todo un reto, también lo considera una de las mejores experiencias de su etapa como universitaria.
Para Natali, lo más complicado del Consejo Universitario fue la división entre los dos ámbitos de su vida.
Por un lado, no dejas de ser estudiante, pero por el otro también representas una figura de autoridad dentro de la universidad […]. Lo más difícil es aprender a separar y decirle a los demás que no por estar en un cargo dejas de serlo. Yo en el consejo buscaba que se respetara la igualdad, el estar ahí con mis demás compañeras era una forma de representar a las mujeres dentro de la política universitaria.
Según Natali, su principal aporte dentro del Consejo Universitario fue el reconocimiento de la situación de violencia de género en la facultad y su discusión en el órgano colegiado.
El balance entre los estudios y el cargo de representación fue un proceso complicado para ella; sin embargo, continuó desarrollándose dentro y fuera de la universidad.
Había veces que llegaba a mi casa y decía ‘chin’, es que hoy no lo logré… No logré que mis compañeros no me vieran como su consejera, sino que me vieran como su compañera de trabajo o de equipo. Yo jamás me sentí más que ellos porque sé que para que yo estuviera ahí hubo más mujeres que tuvieron que pasar…
¿Cómo lucha Natalí Ixchel?
Me ha costado bastante mencionar cómo es que yo lucho. Me gusta leer, me gusta la academia, yo lucho desde ahí, No me gusta que solo la literatura que lees en la escuela sea escrita por hombres […]. Quiero ser parte de estas mujeres académicas que pueda generar teorías desde una visión distinta.
Para Natali, el hecho de rescatar las voces de las mujeres es algo primordial, así como sus historias de vida, no en el sentido de darles voz, porque ellas tienen una voz […], sino lograr que lleguen más lejos esas voces.
Actualmente, Natali Ixchel es ganadora del Premio Estatal de la Juventud 2022 en la modalidad de labor social, es reportera de la Dirección General de Comunicación Universitaria de la UAEMex, graduada como licenciada en Comunicación con honores, fundadora del Taller de Metztli y forma parte de la producción del programa con perspectiva de género Vivas.
Si pudiera describirme en tres palabras serían: muy cariñosa, alegre y muy, muy… ¡imprudente!