Toluca, Estado de México; 3 de mayo de 2018. En la capital mexiquense es común que los peatones tengan que sortear diversos obstáculos para circular libremente por las banquetas. Desde falta de las mismas, pasando por estacionamientos implementados sin la regulación debida, hasta bajar de la banqueta porque los dueños de comercios o negocios deciden colocar sobre la misma los productos que ofertan o que necesitan para brindar sus servicios.
Tal es el caso de las llamadas vulcanizadoras, mismas que a la par de obstruir el paso peatonal, generan contaminación por el tipo de material que utilizan.
Ejemplo de ello son los negocios ubicados en Avenida Las Torres, una de las arterias principales de la ciudad de Toluca. Con rumbo a Zinacantepec y entre las calles Isidro Fabela y Felipe Berriozabal en la colonia Santa María de las Rosas las vulcanizadoras se han apoderado de las banquetas, ocupando casi en su totalidad el espacio dedicado para los peatones.
Aunado a ello en la misma zona, los automóviles se estacionan de forma indebida sobre los carriles de alta y baja velocidad, situación que obliga a los peatones a bajar de la banqueta.
En un recorrido realizado por AD se pudo constatar dicha situación, y aunque vecinos del lugar prefirieron emitir comentarios al respecto, en diversas ocasiones se han manifestado en desacuerdo.
Por diferentes rumbos de la ciudad se aprecia como talleres dedicados a la venta y reparación de neumáticos, exponen las llantas en las aceras de las calles causando contaminación ambiental y visual.
Según el bando municipal de policía y buen gobierno de la ciudad de Toluca, en su artículo 105, señala que son infracciones a las disposiciones de tránsito y vialidad: “III. Interferir, obstaculizar o impedir deliberadamente el tránsito de vehículos o peatones en las vías públicas”.