OHL: Los negocios millonarios del peaje

Toluca, México; 16 de agosto de 2018. La empresa española Obrascón Huarte Lain (OHL) llegó a México en la primavera del 2002 y un año después logró su primera concesión, el Circuito exterior Mexiquense en el Estado de México.  Dieciséis años después, en 2018, OHL México, hoy Aleatica, cuenta ya con siete concesiones carreteras en […]

Toluca, México; 16 de agosto de 2018. La empresa española Obrascón Huarte Lain (OHL) llegó a México en la primavera del 2002 y un año después logró su primera concesión, el Circuito exterior Mexiquense en el Estado de México.  Dieciséis años después, en 2018, OHL México, hoy Aleatica, cuenta ya con siete concesiones carreteras en el país y una aeroportuaria, de las cuales cuatro están en el Estado de México. Además del Circuito Exterior Mexiquense, la empresa administra el Viaducto Elevado Bicentenario, la autopista Atizapán-Atlacomulco y una parte de la concesión del Aeropuerto Internacional de Toluca; a ellas se suman la Autopista Amozoc-Perote, la Autopista Urbana Norte, la Supervía Poetas y el Libramiento Elevado de Puebla. 
Pero el Circuito Exterior Mexiquense representa la principal fuente de ingresos para la empresa española, pues, de acuerdo con sus reportes bursátiles, sólo en los primeros seis meses de este año obtuvo dos mil 22 millones 246 mil pesos en cuotas de peaje, mientras que en los últimos trece años (2005-2017) los ingresos de Concesionaria Mexiquense (Conmex), subsidiaria de OHL, sólo por las cuotas del Circuito Exterior Mexiquense, suman ya 22 mil 289 millones de pesos, como detallan los informes. 
Los cálculos más conservadores estiman que en los próximos 34 años (hasta el 2051, fecha en que termina la concesión) Conmex obtendrá ingresos estimados de al menos 125 mil 870 millones de pesos más en cuotas de peaje, si se toman como referencia los tres mil 702 millones que recaudó el año pasado.  Esto representa que, en 47 años, la empresa española reportará ingresos, sólo por estas cuotas, de al menos 148 mil 159 millones de pesos. 

Alza de peaje 
En el Estado de México, la empresa española ha gozado manga ancha para aumentar el costo de casetas según convengan sus intereses y sólo de febrero de 2017 a agosto 2018 las tarifas han aumentado en cuatro ocasiones. La primera alza se registró en febrero de 2017, cuando el peaje subió 2 por ciento, y seis meses después se registró una siguiente, del 4 por ciento. 
En febrero de este año incrementó el precio a las tarifas al 6.2 por ciento y la madrugada del domingo 12 de agosto comunicaron otro ajuste, por lo que a partir del lunes 13 el costo aumentó entre el 5 y 10 por ciento. Con base en esto, se interpreta que los costos varían de uno a nueve pesos en cada una de las 32 casetas que conforman la ruta del viaducto, el cual conecta a las principales autopistas que desembocan en Ciudad de México, como las de México-Querétaro, Chamapa-Lechería, México-Pachuca, México-Tuxpan, Peñón-Texcoco y México-Puebla. 

Concesión a modo 
En febrero de 2003, Conmex obtuvo la concesión del Circuito Exterior Mexiquense. Aunque en la firma del primer contrato se estipuló que la concesión tendría un plazo de vencimiento hasta 2030, ésta se ha modificado en al menos seis ocasiones para beneficiar a la firma española, que ha logrado la ampliación del plazo de la concesión hasta 2051. 
Pero los favores del gobierno del Estado de México a la firma española no son nuevos y el periodista Jenaro Villamil ha documentado que la sombra de la sospecha ha perseguido a OHL desde su llegada a México, de modo que dio a conocer declaraciones de Gabriel Núñez, director general económico-financiero de OHL-Concesiones, donde confiesa en un documento interno de la compañía española que el Circuito Exterior Mexiquense se planeó por las autoridades del Estado de México para beneficiar a la trasnacional, presidida por Juan Villar Mir.  
“En el año 2002, la administración pública detectó la necesidad de crear un segundo cinturón al exterior al Circuito Interior que ya tenía construido y, por supuesto, no tenía recursos suficientes para construir, sino siquiera analizar su viabilidad económica y técnica. Eso lo hizo OHL con sus propios recursos”, sentenció Núñez. “Después de año y medio aproximadamente de trabajo conjunto con la administración y financiado por OHL, se sacó a licitación pública el proyecto y se adjudicó en el año 2003”, presumió el directivo de la constructora. 

Favor con favor 
La firma española ha sido agradecida y ha pagado los favores del gobierno mexiquense, como lo exhibió el año pasado Manuel Álvarez Icaza, de la organización ciudadana Ahora, quien señaló a OHL de financiar desde hace 15 años las campañas políticas de los candidatos del PRI en el Edoméx. “Usan el poder para enriquecerse. Y usan el dinero para mantenerse en el poder. Es un ciclo de corrupción desde el poder para mantenerse en el poder”.   
Pero OHL se ha visto envuelta en numerosos casos más de corrupción, el más polémico a raíz de una llamada telefónica en 2015 en la que José Andrés de Oteyza, entonces presidente de OHL México, conversaba con Pablo Wallentin, ex representante de la misma, y menciona una supuesta reunión que sostuvo con el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y el presidente Enrique Peña Nieto. El tópico de ese intercambio versó acerca de las modificaciones que hicieron al título de concesión.  
Una de las modificaciones (2008) fue el aumento al costo de las tarifas, pues establece que los incrementos obedecen a la inflación anual; si el incremento del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) es mayor al 5 por ciento antes de que se cumpla un año desde la última actualización, el Sistema de Autopistas, Aeropuertos, Servicios Conexos y Auxiliares (SAASCAEM) determinará si se aprueba su aplicación. 
Desde 2011, gracias a este ajuste, se le concede a la empresa el derecho a elevar las tarifas sin requerir la autorización. La empresa ha aumentado los costos y el gobierno del Estado de México se ha reservado la información en donde la empresa justifica estos incrementos, que van de 25 por ciento cada uno entre 2013 y 2016. Nótese, también, que los ajustes se aplicaron independientemente del nivel de aforo vehicular. 
Otra modificación al título de concesión ocurrió en diciembre de 2012, días después de la toma de posesión del presidente Enrique Peña Nieto. Entonces, se firmó un contrato para concesionar el Circuito Exterior Mexiquense hasta el 2051, pues la vigencia para la construcción, explotación, operación, conservación y mantenimiento de la autopista establecía la fecha del 06 de mayo de 2038.  

Acciones a la baja 
A raíz de los escándalos de corrupción de la empresa y los problemas internos, sus acciones han decaído desde el 2014, momento en que decrecieron casi un 35 por ciento. En 2017, las acciones cayeron un 17,2 por ciento, que representan una pérdida de 12 millones de euros. Esto ha obligado a la empresa a tomar medidas, como cambiar cuatro veces de máximo ejecutivo en los últimos dos años. En precariedad, OHL nombró a José Antonio Fernández Gallar Consejero Delegado, quien representa el segundo cambio en menos de un año.