Toluca, Estado de México; 18 de julio de 2019.- Cuatro meses tardaron los padres de un joven en localizar su cuerpo debido a la negligencia de dos funcionarios del Servicio Médico Forense del Estado de México que lo enviaron a la fosa común, por lo que la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió la recomendación 44/2019.
De acuerdo a información de Reforma, los funcionarios no registraron el cuerpo en la "Plataforma de Gestión de Cadáveres y Restos Humanos no Identificados", por lo que la CNDH determinó que “se violaron los derechos de acceso a la justicia y a la verdad, tanto de la víctima como de los familiares”, y se atribuyó dicha responsabilidad a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, de la cual depende el Semefo.
La víctima era un joven de 19 años, jugador de futbol americano, que fue secuestrado y asesinado en Naucalpan, en 2017. Su cuerpo permaneció 23 días en el Servicio Médico Forense de la entidad, y luego inhumado en una fosa común, en donde estuvo más de tres meses hasta que finalmente fue localizado.
Debido a que no fue registrado en la Plataforma de Gestión de Cadáveres y Restos Humanos no Identificados", no pudo ser identificado de inmediato, pese a que sus padres habían presentado de inmediato la denuncia de su desaparición.
Por estos hechos, la CNDH recomendó se repare de manera integral el daño a la madre y padre del joven victimado, en términos de la Ley General de Víctimas y Ley de Víctimas del Estado de México, luego de que se le remitiera la investigación correspondiente iniciada por la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México.
También se recomendó que los padres de la víctima puedan recibir apoyo del Fondo Estatal de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, y se les brinde atención psicológica y/o tanatológica.