Acto II
Toluca, México; 31 de mayo de 2019. Nueve bailarines de la compañía de Ballet Clásico del Estado de México temen ser destituidos de su puesto, luego de haber hecho públicos los abusos y agresiones que el director de la compañía de Ballet Clásico del Estado de México, Armando Pineda, cometía contra los integrantes de la agrupación.
Escena I. Destrucción o reestructuración del Ballet Clásico del Estado de México
Los “cambios” en la compañía comenzaron cuando, en noviembre del año pasado, a los bailarines les pidieron que firmaran su renuncia, esto con el fin de contratarlos como bailarines, en vez de conservar el estatus de servidores públicos (régimen bajo el que estaban contratados). Los bailarines aceptaron el acuerdo y firmaron su renuncia.
Las cosas, sin embargo, tomaron un giro distinto: las fundadoras Iana Guerasskina y Dilza Bustabad fueron destituidas de su cargo y los bailarines no tuvieron empleo y tampoco recibieron ningún sueldo durante dos meses.
Antes de las transformaciones injustificadas que comenzaron en 2018, las variaciones que había tenido la compañía habían sido siempre para mejorar. Mientras Bustabad y Guerasskina fungieron como titulares del ensamble dancístico, los bailarines perfeccionaron su técnica; la producción, los salarios, las presentaciones incrementaron y sobre todo, con su danza cada vez llegaban a más personas de diversas latitudes, tanto estatales como nacionales.
Escena II. Una secretaria de cultura que desconoce el trabajo de la compañía
La titular de la Secretaria de Cultura, Marcela González ha declarado que sus integrantes serán destituidos porque están gordos, por indisciplinados, o porque provienen de casas de cultura. “Y aunque fuéramos de casas de cultura, estos espacios son semilleros”, expresó Emmanuel Badillo, uno de los bailarines del ballet, en entrevista con el equipo de AD.
A pesar de las evidencias que respaldan el trabajo de la compañía, González justifica la destitución en el “hecho” de que la compañía no genera evidencias. La secretaria no reconoce el trabajo que desde hace 12 años ha realizado el ballet mexiquense, el cual consta de 70 funciones anuales, aproximadamente; además de su participación en más de 30 festivales nacionales e internacionales con una variedad de piezas que, en suma, son más de 30.
De acuerdo con los bailarines, un proceso de reestructuración implica trabajar con los recursos humanos que se tienen y que si bien, hay cambios en la estructura, los integrantes se mantienen y no se relegan de forma injustificada.
Escena III. Los oídos sordos de las autoridades
Los bailarines han llevado sus demandas sobre acoso y su actual situación laboral ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, pero ahí todavía no les dan respuesta.
Cuando acudieron al centro de Atención Ciudadana del gobierno estatal, pidieron una audiencia con el titular del ejecutivo mexiquense, Alfredo Del Mazo, misma que les fue negada. Lo que les ofrecieron ahí fue una cita con Ivette Tinoco, directora general de Patrimonio y Servicios Culturales. Ella solo les ha dicho que deben informarse acerca de la manera en que funciona su contrato y que si tienen dudas, acudan a la institución correspondiente pues en la Secretaría de Cultura no resolverán ese tipo de problemas.
Respecto al trato de Pineda, Tinoco solo les dijo “El maestro no se supo expresar”.
A la fecha no han tenido un acercamiento con Marcela González y su situación laboral permanece en vilo.
Escena IV. La compañía queda entre amigos
Los bailarines de la compañía de Ballet Clásico del Estado de México no han sido notificados oficialmente sobre la supuesta destitución que anunció Marcela González. Pero esa no es la única irregularidad en su situación.
En la función del Día Internacional de la Danza, los bailarines que confrontaron a Pineda no se presentaron, aunque sí participaron durante el proceso de montaje, en los ensayos; aunque a dos de ellos se les asignaron roles principales. Quienes ocuparon sus lugares fueron amigos de Pineda.
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Escena V. Una convocatoria que justifica la violencia
El 30 de mayo se hizo pública la convocatoria para formar parte de la Compañía de Danza del Estado de México.
Según un comunicado que la Secretaría de Cultura emitió el mismo día, hay dos condiciones indispensables para quienes deseen formar parte de la Compañía de Danza del Estado de México:
"Se abren espacios de reclutamiento de bailarinas y bailarines cuyo principal requisito es la disciplina y dolor”
como anticipando alguna suerte de mal trato para los que ingresen.
Mientras la convocatoria circula, la situación de los bailarines aún no se aclara.
Para lograr una audiencia con el gobernador, habilitaron esta petición. Si quieres ayudarlos, esta es una buena manera de hacerlo.