La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró en el municipio de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, a un leopardo negro, aproximadamente de nueve años.
Durante la tarde de este jueves, la Profepa recibió una denuncia ciudadana y en atención a ésta visitó un domicilio particular ubicado en el Fraccionamiento Valle Escondido donde los inspectores detectaron faltas al trato digno y respetuoso del ejemplar, además de que el dueño no pudo acreditar su legal procedencia.
Durante la diligencia, se observó que el leopardo negro, que carece de sistema de marcaje como lo establece la ley ambiental, no contaba con las instalaciones óptimas para su cuidado y manutención.
Asimismo, presentaba una herida sin atender en una de sus extremidades, por lo que fue trasladado a una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) donde recibirá atención y los cuidados necesarios para su recuperación.
La panthera pardus se distribuye de forma natural en África y Asia, en México es considerada una especie exótica y su posesión debe estar autorizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), una vez que se cumpla con una serie de requisitos, entre ellos, la presentación de un adecuado Plan de Manejo.
En otro rescate, la Secretaría de Seguridad Ciudadana decomisó un tigre blanco en una casa de dos plantas que se encuentra en obra negra.
La dependencia informó que el hallazgo se realizó derivado de una denuncia ciudadana en la que se reportó que sobre el paraje “La Calera”, se encontraba un tigre de color blanco, al interior de un cuarto cerrado con candado y cadenas.
Elementos del 19º Batallón de Caballería Motorizado del Ejército Mexicano mantienen custodiado, hasta el momento, al tigre dentro de la vivienda.