Toluca, Estado de México; 2 de octubre de 2019.- En España retiran de manera preventiva todos los medicamentos que contienen ranitidina en pastillas, luego de detectarse una impureza en este popular producto que es utilizado para tratar la úlcera del estómago y otros malestares del tracto digestivo, que podría tener efecto cancerígeno.
Información del diario El País señala que el pasado 13 de septiembre, autoridades de salud españolas que en algunos medicamentos con ranitidina se encontraron rastros de N-nitrosodimetilamina sustancia que aumenta el riesgo de cáncer de pulmón y de otro tipo, según estudios hechos en animales, si bien en humanos no hay todavía pruebas que confirmen esa posibilidad, aunque la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud lo califica como de nivel 2A, “probablemente carcinogénico en humanos”.
De acuerdo al diario español, desde junio del año pasado comenzó la búsqueda de esa sustancia, luego de que se encontraron pequeñas cantidades de nitrosamina en un medicamento usado para la hipertensión –valsartán- y que son de la misma familia, lo que provocó el retiro de más de un centenar. Esto llevó a la Agencia Europea del Medicamento a solicitar un endurecimiento en los requisitos para la fabricación de ciertos fármacos.
“El informe además, especificaba que la formación de nitrosaminas está relacionada con determinados procesos de elaboración de los medicamentos, por lo que unos tenían más posibilidades de contenerlas que otros y amplió la revisión a los fármacos orales con ranitidina.
En España, la Aemps ha ordenado la retirada de todos los lotes de esta sustancia en comprimidos disponibles en el mercado, correspondientes a 16 compañías farmacéuticas”, destaca El País.
Sin embargo, también se explica que las nitrosaminas están presentes en muchos alimentos, como los embutidos y se generan con procesos de ahumado y tostado. En este sentido, Carlos Alonso, presidente de la asociación Farmaciencia, lanza un mensaje de tranquilidad a los pacientes que consumen el fármaco, ya que es, en su opinión, sumamente improbable que cause daños a la salud.
Por otra parte, una asociación española de la industria farmaceútica señala que en ningún caso está justificado que los pacientes interrumpan los tratamientos con ranitidina sin consultar con su médico en caso de que sea necesario que tengan que cambiar de medicamento.