Ella es Delfina Gómez, la modesta maestra que logró que la izquierda gobierne el Edomex

Las escenas de Delfina saludando a los vecinos, yendo a comprar tortillas y deteniéndose a tomarse una foto son cada vez menos

Delfina Gómez Álvarez caminaba una cuadra y media sobre las calles Arteaga y Fray Pedro de Gante, en el centro de Texcoco. Llegaba a la tienda departamental donde compraba artículos de despensa y, seguramente, alimento para sus mascotas y las de sus vecinos.

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Si el día es soleado, a Delfina le basta caminar no más de 10 metros para comprar una paleta de hielo de limón en el local de la señora Paty, a 15 pesos. 

En la casa ubicada en el 302 A de la calle Arteaga y construida por los padres de Delfina —el albañil José Guadalupe Gómez Pérez y el ama de casa Catarina Álvarez Maldonado— un par de gatos esperan a la texcocana. 

Fotos: Victor García

La exsecretaria de Educación Pública platicó al periodista John Ackerman en junio de 2021, que llevaba 59 años viviendo en el municipio, su edad.

“Le decía a mi mamá en son de broma, `soy la música que llegó para quedarse´ porque no me he salido de la casa materna”, contaba.

Esa música parece apagarse de a poco. Las escenas de Delfina saludando a los vecinos, yendo a comprar tortillas, deteniéndose a tomarse una foto son cada vez menos. Disminuyeron desde que llegó a la SEP en febrero de 2021, según los residentes y locatarios del barrio de San Pedro.

El arraigo de Delfina a su municipio y la comodidad hogareña se van convirtiendo más en un cariño a distancia. El encargo de la SEP la alejó primero 29 kilómetros hasta la calle de República de Argentina 28, en el centro histórico de la Ciudad de México.

Luego fueron más de 120 kilómetros hasta las nuevas oficinas de la dependencia, ubicadas en la avenida 4 Oriente número 408, en el centro histórico de Puebla.

Los kilómetros y sus aspiraciones políticas pretenden seguir poniendo distancia. En esta ocasión, la militante del partido Morena, quiere llegar a 100 kilómetros desde el barrio de San Pedro hasta la sede del poder ejecutivo del Estado de México, ubicado en el corazón de su capital, Toluca.

El pasado jueves 4 de agosto, Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, anunció que Delfina será, por segunda ocasión, la candidata del partido a la gubernatura del Edomex.

Para no incumplir con la ley electoral por actos anticipados de campaña, Delfina Gómez se desempeñará como coordinadora de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación.

La exsenadora por Morena, derrotó en las dos encuestas sobre preferencias a otros miembros de su partido, como su antes mentor político, el senador Higinio Martínez, a Horacio Duarte y a Fernando Vilchis. 

Ninguno pudo con la popularidad de Delfina, construida en los puestos de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador; quien la considera una persona cercana y ha defendido en más de una ocasión.

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La nostalgia y la austeridad republicana 

Delfina Gómez se convirtió en uno de los referentes de la 4T. Fue senadora de Morena por el Edomex, delegada estatal de Programas para el Desarrollo Integral en la misma entidad y titular de la SEP.

En cada uno de estos cargos, ha replicado y defendido las políticas que impulsa el presidente, así como sus discursos. 

Apenas un mes después de asumir la secretaría de Educación, Delfina anunció un recorte de personal en las direcciones y subdirecciones de los estados.

La funcionaria busca reproducir esta forma de hacer política en su vida diaria. La casa donde asegura que sigue viviendo, es la misma que construyeron sus padres. No la ha ampliado ni demolido, por la nostalgia del esfuerzo que empleó su familia para construir su patrimonio y pagar las carreras de Delfina y sus hermanos Guadalupe y Alejandro, en la normal de maestros de Texcoco.

Una puerta amarillenta de metal al centro con ventanas de herrería y pintura que se resquebraja, una placa de metal oxidado con el número 48, una instalación para el medidor de electricidad sin medidor, son la fachada de la casa materna de la funcionaria, quien percibe un sueldo mensual de 114 mil 647.20 pesos, de acuerdo al portal de transparecia.

En una de las ventanas de la fachada está todavía pegada una estampa de su campaña para diputada federal, donde se le ve junto al entonces candidato a alcalde de Texcoco, Higinio Martínez; sentados en una banca de parque, Delfina rodea el brazo izquierdo del ahora senador.

La señora Cecilia Álvarez Medrano, vecina de Delfina Gómez, contó a AD Noticias que en el periodo de la diputación federal (2015 a 2018), utilizaba el transporte público para trasladarse al Congreso de la Unión.

Compartió que la entonces legisladora federal por Texcoco, usaba los camiones que van de la Terminal de Autobuses de Pasajeros de Oriente (TAPO) al municipio mexiquense y que cobran entre 35 y 50 pesos.

“Se venía en el Tepetitlán, a veces ella comentaba que le daba pena porque le pagaban el pasaje, ella se venía en el transporte público, no necesitaba de un carro o automóvil para moverse”, relató.

El ambiente de añoranza que guarda la casa de 52 metros cuadrados, seis árboles de cicus y dos de enebro; ocho bancas de metal de color blanco, un busto de bronce y una carreta de madera, seis casas en color amarillo con una franja naranja en la parte inferior, y el local de paletas y helados “Patylu”, se disponen en el triángulo de 400 metros cuadrados que delimitan las calles Arteaga y Leandro Valle.

Una mujer sencilla y honesta

López Obrador celebró el nombramiento de Delfina como candidata y la calificó como “una mujer buena, trabajadora y honesta”.

De igual forma, Mario Delgado destacó el contraste entre la personalidad de la funcionaria y la clase política dominante actual.

“La sencillez de la maestra Delfina nos conquista y posee una honestidad a toda prueba. Ella representa los valores contrarios a los que ha tenido la clase política mexiquense en los últimos años”, expresó.

Pero estos halagos no sólo vienen de la alta clase política mexicana, los ciudadanos de a pie también respaldan dichas afirmaciones.

Sus vecinos la conocen. La saludaban y platicaban con ella antes de que Higinio Martínez y Horacio Duarte la invitaran a unirse a Morena, antes de que fuera representante sindical, aun cuando daba clases de primer año en las primarias de la localidad.

“Ella viene de cuna humilde, se costeó la carrera de docente, ya que era institutriz de unos niños a los cuales ella apoyaba en sus tareas y sus labores escolares y sacó adelante esos niños”, contó la señora Cecilia Álvarez.

Doña Ceci, como la conocen en la cuadra, vive a espaldas de la casa materna de Delfina. No externa más que buenos comentarios de su vecina, y lo hace con respeto a la persona y a los puestos del servicio público que ostenta. 

La sencillez la tiene a flor de piel”, responde a la pregunta de si la morenista ha cambiado su forma de ser con el paso de los cargos. “Para ella los lujos no significan nada, eso a ella no le interesa. Si quisiera se comprara una residencia”. 

Asegura que también fue buena docente. Resalta el afecto que tiene por los niños, incluso cuenta cómo organizaba kermeses el Día del Niño. Por esas cualidades sus vecinos la han apoyado en las distintas campañas y en los comicios del 2023 no será la excepción.

“Todo el barrio la apoyó en la campaña, volanteando, en reuniones. Siempre la apoyamos porque nos sentimos muy orgullosos de ella”, aseguró la señora Ceci. 

La Morena, el Duvalín y el Canelo

Las anécdotas sobre acciones altruistas de Delfina Gómez en su comunidad son comunes entre los vecinos. Desde apoyos económicos hasta el pago completo de tratamientos médicos; sin embargo, si por algo es reconocida la política en su barrio, es por su trabajo en favor de los animales.

Miguel Ángel Aguilar, vecino del barrio de San Pedro, reconoce las labores que ha hecho la funcionaria en este rubro, como campañas de esterilización y rescate de animales en situación de abandono.

Delfina Gómez en diversas entrevistas ha compartido que estas mascotas son su compañía en su casa, debido a que no es casada ni tiene hijos. A la fecha tiene un proyecto de construir un albergue para perros y gatos en Texcoco.

La Morena, el Duvalín y el Canelo serán de los primeros huéspedes de este refugio. Son tres perros que Delfina Gómez rescató y se han convertido en favoritos de la exsenadora.

“Son famosos aquí en la comunidad porque los identificamos con la profesora”, compartió Miguel Ángel.

Pero no son los únicos, al menos cinco perros y 10 gatos están al resguardo de Delfina Gómez. Los tiene como animales de compañía, no de protección, pues los lugareños señalan que no cuenta con dispositivo de seguridad o guardaespaldas.

“Nosotros la conocemos, siempre sin aspavientos de seguridad, vemos a otros políticos de renombre y pues llegan con sus dispositivos, con sus caravanas, camionetas blindadas, con escoltas y la profesora acaso llega con su chofer.

Es una mujer muy sencilla y siempre se ha manifestado en ese tenor. A veces los sábados la vemos en el mercado, comprándose aquí un tamalito en el puesto de la esquina”, contó Miguel Ángel Aguilar.

Por su parte, el señor Alejandro Aguilar, también vecino de Texcoco se suma a la complacencia de atributos.

“Es digna representante de nuestro pueblo, porque la esencia que tiene ella es de humildad, no solamente se refleja en la parte material, por supuesto también en la parte espiritual.

“El pueblo lo percibe y es lo que el pueblo necesita. El pueblo necesita también de un abrazo, de un apapacho, necesita algo que le dé fortaleza. El pueblo es muy sabio, se da cuenta de quién sí y quién no. Estoy segurísimo de que en esta ocasión (Morena) han acertado mucho en haberla elegido.

Fotos: Victor García

¿Esta es la buena?

En 2017, votaron 52 mil 820 texcocanos por Gómez Álvarez, logrando el 52.18 por ciento del total de la votación válida recibida. La lista nominal del municipio era de 185 mil 399 electores, de los cuales participó el 56.96 por ciento, es decir, 103 mil 748 ciudadanos y ciudadanas.

Opiniones divididas prevalecen hasta el día de hoy, si bien hay beneplácito por la designación de Delfina como la abanderada de Morena, también existe un sector de la población que no confía en la exalcaldesa. 

También está presente el rechazo total a personajes específicos.

“Es una mala noticia (el nombramiento), por sus antecedentes, dicen que no quieren corrupción y ella cuando fue presidenta a todos los perjudicó. Tenían que cooperar para el PRD, fueran perredistas o no, los afectaron a todos. A mí hijo le quitaban en su nómina la cooperación para el partido”.

 “No podemos tapar el sol con un dedo, lo vivimos, mi hijo ahí trabajó, estaba en administración de rentas”, declaró el señor Roman Díaz, vecino de la colonia Santa Cruz.

Con estos claroscuros que rodean su vida cotidiana en Texcoco, Delfina Gómez repetirá como candidata de Morena a la gubernatura. Cinco años han cambiado las condiciones, esta vez, su partido está en el poder federal, gobierna en 20 entidades y tiene 252 diputados en el Congreso de la Unión.

Además, una senaduría, el manejo de programas sociales en el estado y la titularidad de la Secretaría de Educación serán la experiencia que usará como herramientas para intentar terminar con la hegemonía del PRI que ha estado en el poder estatal durante 94 años.

¿Lo logrará?