Ser albañil, mucho trabajo y poco dinero

Toluca, México. 3 de mayo de 2019. Alfredo es una de las 628 mil 525 personas que se dedican a la construcción en el Estado de México. Como muchas otras actividades laborales en el país, la suya también carece de derechos laborales básicos: solo el 11 por ciento de quienes trabajan en la construcción tienen […]

Toluca, México. 3 de mayo de 2019. Alfredo es una de las 628 mil 525 personas que se dedican a la construcción en el Estado de México. Como muchas otras actividades laborales en el país, la suya también carece de derechos laborales básicos: solo el 11 por ciento de quienes trabajan en la construcción tienen un contrato escrito y el 86 por ciento no cuenta con prestaciones. Del 14 por ciento restante que sí las recibe, menos de la mitad accede a apoyos laborales, de salud y seguridad social. 

Los “chalanes” que ayudan a Alfredo en la obra forman parte del 94.3 por ciento de los hombres que trabajan en el sector de la construcción. En teoría, el salario mínimo que perciben es de 116.7 pesos, pero este puede variar conforme a su puesto.

Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo ENOE (2014), la edad promedio de los albañiles ronda los 30 y 49 años; ocho de cada 100 tienen menos de 20 y solo 18 son mayores de 50. Alfredo cumplirá 67 en agosto y entre las huellas que le ha dejado esta actividad se encuentra su constante dolor en la espalda baja, así como el caminar encorvado que quizá se debe a los bultos de cemento que, desde hace casi 50 años, carga en la espalda -en un grupo de 100 albañiles, 64 sufren problemas para moverse, caminar, subir y bajar; 22 tienen dificultades visuales y 11 presentan déficit auditivo, según la ENOE. 

Alfredo forma parte del 16.3 por ciento de los albañiles que trabajan por su cuenta. En México, el 74.8 de los trabajadores de la construcción lo hacen de manera subordinada; 8.7 son empleadores y 0.2 no reciben una remuneración por su actividad. 

Hoy, tres de mayo, Alfredo y los trabajadores que colaboran con él se agasajan con la comida que el patrón dispuso para ellos en la obra. Mañana seguirá la jornada normal.