Diputados mexiquenses aprobaron la iniciativa del Partido Acción Nacional (PAN) y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para instaurar los gobiernos de coalición en el Estado de México. Cuarenta y cuatro diputados votaron a favor, 29 en contra y dos diputados morenistas no emitieron voto.
El proyecto fue dictaminado el martes pasado y subido al pleno este jueves. La intención es que la reforma entre en plazo establecido en la ley para aplicar reformas electorales antes al menos 90 días antes del inicio de las elecciones más cercanas.
Con la aprobación de las modificaciones a la ley electoral, los partidos políticos tendrán la facultad de realizar convenios para decidir –previo a los resultados de la jornada electoral– la distribución de cargos en el gabinete que tendrá cada partido integrante de la coalición.
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La Legislatura también tendrá la facultad de decidir sobre la integración del gabinete ejecutivo y órganos autónomos.
La reforma también prevé que el poder ejecutivo del estado establezca la agenda legislativa en coordinación con todas las fuerzas partidistas del congreso.
Asimismo, el acuerdo aprobado contempla que el Tribunal Electoral del Estado de México sea quien resuelva las hipotéticas controversias que surjan del incumplimiento de los acuerdos de los gobiernos de coalición.
Este jueves también se aprobó la Ley de Gobiernos de Coalición que reglamenta las normas para la integración, funcionamiento y disolución de este tipo de gobiernos.
Presentarán controversia en la corte
En la discusión del dictamen, diputados de Morena anunciaron que presentarán una controversia en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Pues consideran que la reforma viola la separación de poderes.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Maurilio Hernández González, declaró en entrevista con medios que se debe proteger el régimen republicano que existe en la entidad y no instaurar un gobierno parlamentario.
“Están pretendiendo que la Legislatura en este caso tenga facultades supraconstitucionales para que –de acuerdo con la correlación que se dé de fuerzas en el número de diputados que cada grupo parlamentario logre– pueda determinar la propuesta para tal o cual secretaría y que sea una obligación legal y constitucional del titular del Ejecutivo que la legislatura le presente la propuesta de tal o cual secretario. Nos parece que eso es un híbrido como hemos dicho, nosotros no podemos violentar el régimen republicano”, declaró.
Maurilio Hernández consideró que la reforma es inviable y se “echará abajo en la Suprema Corte”.
El grupo parlamentario de Morena votó en contra de la iniciativa, pero fue apoyada por su aliado, el Partido del Trabajo. Al respecto, el presidente de la Jucopo comentó que esto no afecta la relación electoral ni legislativa. Pues entienden que los gobiernos de coalición les convienen a las fuerzas minoritarias, que accederían a una o más secretarías en el caso de un gobierno coaligado.
No es repartirse el poder: PRD
En la discusión del dictamen hubo señalamientos de diputados morenistas en contra de panistas y perredistas, impulsores de la iniciativa. A quienes acusaron de generar las condiciones para “repartirse el poder” e intervenir en las decisiones del poder ejecutivo.
Isaac Montoya de Morena señaló que se trata de un asunto político que pretende “amarrar a un gobernante” por parte de quienes resulten perdedores en una contienda electoral.
Daniel Sibaja, también morenista, denunció que la reforma viola la separación de poderes y extralimita las funciones de la cámara de diputados. Asimismo, el legislador Faustino de la Cruz criticó que la propuesta fuera impulsada por el panista Enrique Vargas, quien se perfila como posible candidato a gobernador.
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Por su parte, el perredista Omar Ortega aseguró que no se trata de “repartirse el pastel”, sino de garantizar la representación de todas las fuerzas políticas que participan en un proceso electoral.
Al inicio de los comentarios sobre el dictamen se registraron participaciones de diputados de diferentes partidos, sin embargo, durante la discusión los panistas desistieron de su participación y solo el perredista Omar Ortega defendió su iniciativa.