Cuauhtémoc y los primeros rayos del sol
Amanece y en la alameda de la Toluca Cuauhtémoc vigilia a quien se dirige a la escuela o al trabajo. Los fines de semana acompaña a las infancias que juegan con pelotas, en los columpios y resbaladillas.
El águila y el tráfico
Por aquí hay congestionamiento vial a las siete de la mañana y las seis de la tarde. Cuando gana el equipo local se celebra alrededor de la fuente. Repartidores de comida se reúnen en el sitio para llevar pedidos.
El laberinto de la normal
En esos pasillos se forman profesoras. Su arquitectura nos remonta al Porfiriato, a una Toluca que ya no existe.
La marina y el obelisco
Un pequeño obelisco blanco le rinde tributo a la Marina. Alrededor se encontraba una pedrera; de la roca de ese monte se construyó parte de la ciudad. Ahora hay un parque dedicado a la comunidad libanesa.
Las torres y el volcán
Un par de columnas de metal sustituyeron la Puerta Tollotzin. La modernidad va de la mano con estructuras brillantes. Al fondo el volcán, que no distingue entre el pasado y el presente.
Tecaxic, su iglesia y los montes
El pasado y el presente. Ahora la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles; en el pasado la vasija de piedra. Tecaxic es una palabra del náhuatl que deriva del vocablo tetl que significa piedra y caxitli que quiere decir vasija.
