Investiga PGR asesinato de  María Villar; edomex y CDMX evaden responsabilidad

Toluca, Méx.- Luego del hallazgo del cadáver de María Villar Galaz, sobrina de Ángel María del Villar presidente de la Federación Española de Fútbol, en un paraje de Santiago Tianguistenco, las autoridades mexiquenses y capitalinas han tratado de evadir sus responsabilidades con  versiones encontradas, de modo que no queda claro si alguien investigará. Anoche, luego de varias […]

Toluca, Méx.- Luego del hallazgo del cadáver de María Villar Galaz, sobrina de Ángel María del Villar presidente de la Federación Española de Fútbol, en un paraje de Santiago Tianguistenco, las autoridades mexiquenses y capitalinas han tratado de evadir sus responsabilidades con  versiones encontradas, de modo que no queda claro si alguien investigará.

Anoche, luego de varias horas de rumores y negativas de información, finalmente la Procuraduría del Estado de México emitió un escueto comunicado en el que, en esencia, señalaba que el asunto no era su responsabilidad, pues la chica habría sido secuestrada en la Ciudad de México y en el Estado de México sólo encontraron el cadáver. Aseguraban que no tenían ninguna denuncia por el secuestro de una ciudadana española.

Sin embargo, apoyarían a las autoridades capitalinas en la investigación para esclarecer los hechos relativos al caso.

En respuesta, las autoridades capitalinas negaron tener alguna investigación abierta por el secuestro de la joven, pues aseguraron que la denuncia se inició ante la PGR.

El 15 de septiembre, fecha en la que fue localizado el cadáver, la Procuraduría General de la República inició formalmente la investigación del caso, a través de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, SEIDO, que recibió la solicitud de intervenir por parte de la  Policía Federal,  luego de que la familia de la víctima pidiera “asesoría” a la corporación el 14 de septiembre.

La PGR ha confirmado que la mujer fue secuestrada a la salida de un cajero automático en Santa Fe, en las cercanías de as oficinas corporativas de IBM, donde María Villar trabajaba.

Ella habría subido a un taxi, donde al parecer se encontró con el secuestrador o secuestradores, aún se desconoce. Luego de obligarla a retirar dinero de su cuenta bancaria en al menos dos ocasiones, hicieron contacto con su familia el 14 de septiembre, para pedirles dinero de rescate.

Su esposo, Cristiano Do Vale y Gorka Villar, su primo, pidieron ayuda a la embajada española. El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, contactó inmediatamente con la Policía Federal.

La Procuraduría  General de la República ha confirmó que Do Vale y Gorka Villar hicieron un pago a los secuestradores el 14 de septiembre. Sin embargo, no fue suficiente para conseguir la liberación de María Villar.

El cadáver fue hallado sin identificaciones, por lo que lo transportaron a la morgue de Toluca, donde se percataron de que se trataba de María Villar y dieron aviso.

Se ha filtrado que la víctima murió asfixiada con una bolsa en la cabeza. Su cuerpo estaba maniatado con cadenas, al igual que los pies.

Trascendió que los familiares de la víctima pagaron en efectivo 65 mil pesos a los secuestradores en un paraje no especificado de la delegación Iztapalapa, al sureste de la capital del país

Su esposo, Cristiano Do Vale y Gorka Villar, su primo, tuvieron contacto con los delincuentes que mantenían retenida a María Villar, pero no consiguieron  que fuera liberada.