Ivanna, una niña activista de 13 años lidera la defensa de Presa Madín

Ivanna, una niña activista de 13 años lidera la defensa de Presa Madín
Ivanna también acompaña otras defensas como la del Bosque de Jilotzingo, que dota de agua a la Cuenca

Ivanna tiene 13 años de edad y al menos un par de años con experiencia en el activismo ambiental. Actualmente ha emprendido diversas acciones mediáticas y participado junto a otras organización en defensa de la Presa Madín, de su cuenca, y del Gran Bosque de Agua al que pertenecen.

Para entender mejor: La Presa Madín y el daño ambiental
que las empresas se niegan a pagar

La edad de Ivanna no ha sido impedimento para incidir en el activismo a favor del medio ambiente y las zonas verdes que aún sobreviven en la zonas urbanizadas del Valle de México.

Aunque ha recibido reconocimientos a nivel internacional, como su nominación al Premio Internacional de la Paz Infantil 2020, de la organización Kids Rights, Ivanna aún espera la respuesta y atención de las autoridades mexicanas.

Por ejemplo, está en espera de que la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum acepte una reunión con ella para hablar sobre el plan de llevar el agua de la presa hacia la zona oriente de la Ciudad de México, a pesar de la escasez que padecen municipios que dependen de la presa, como Atizapán, Naucalpan y Tlalnepantla.

Este medio platicó con Ivanna para conocer cómo es ser activista y ambientalista adolescente en el Estado de México.

«Soy Ivanna Ortega Serret, me dedico al ambientalismo enfocado en la Presa Madín, lo que queda de ella, y tratar se salvarla. Hacemos reforestaciones, nos juntamos con otros grupos y organizaciones para trabajar, para hacer que mis proyectos, o sus proyectos sean aún más grandes y conocidos«, cuenta la estudiante de primer grado de secundaria.

El interés en el ambientalismo, el gusto por las plantas y la botánica llegó a Ivanna desde muy pequeña. Sus primeros pasos en el activismo fue con «cosas pequeñas», como ella relata. «Mi interés nació desde muy chica con cosas pequeñas, como separar la basura, hacer acciones en ciertos lugares, no usar popotes, rescatábamos animales… y desde ahí empecé a hacer pequeñas cosas como activista, hasta que la Presa nos condujo a todo esto del activismo«.

La adolescente reconoce la importancia de aprender con organizaciones y activistas que ya tenían experiencia en el tema.

El lirio invadió la Presa

Entre el año de 2019 y 2020, la aparición en masa de lirio se convirtió en una plaga que cubrió por completo la superficie del agua de la Presa. El lirio también significó el primer paso que la joven dio en defensa de la zona.

Te recomendamos: Limpian lirio en la
enorme Presa Madín de Atizapán

«Le pregunté a mi mamá sobre esa planta, y me dijo que era lirio, que podía ayudar a purificar el agua, o podía afectar como una plaga«, esto último fue lo que ocurrió entonces. «Aprendí que era malo para la presa y que algo lo estaba provocando. Busqué más sobre lo que era lirio, y traté de investigar sobre cómo se tenía que retirar«.

Entonces comenzaron las reuniones con organizaciones que ya atendían el problema, como SOS Madín o Nacel Arcoiris. «Así nos unimos todas las organizaciones«.

Lo más difícil del activismo ambiental para una adolescente

«Nunca me ha gustado mucho la atención, tenía ataques de ansiedad con las entrevistas ahorita ya no tanto. Estamos trabajando para recuperar la presa, hay fauna que depende de ella, y personas que necesitan del agua«.

Influencias adentro y fuera de casa

«En parte, gracias a mi mamá y a la organización Nacel Arcoiris supe qué era el lirio en ese momento. También a Greta, la admiro mucho…«

«Creo que a Greta la han tomado muy en serio… Y a mí también me han tomado en serio, al menos el 90 por ciento de las personas con las que he trabajo. Una que otra no me tomaba en serio, pensaba que iba a dejarlo, que me iba a aburrir o que iba a hacer cosas inservibles«.

«La confianza en mí misma se fue construyendo, aunque al principio fue difícil«.

Una guía para otras niñas

«Hay niñas pequeñas o más grandes, de universidad, que se han acercado a mí para pedir ayuda por algún problema ambiental que conocen. También doy pláticas en primarias para impulsar el ambientalismo desde pequeños, para que se les vaya haciendo costumbre. Yo diría que veo a los niños pequeños más preocupados e interesados que a personas mayores o de mi edad«.

Además de denunciar las descargas ilegales, la contaminación y la escasez del agua en Presa Madín, Ivanna también acompaña otras defensas como la del Bosque de Jilotzingo, que dota de agua a la Cuenca, y donde existe la amenaza por la construcción de 20 mil viviendas como parte de un proyecto inmobiliario denominado Bosque Diamante.

Actualmente, Ivanna Ortega Serret espera la respuesta de Sheinbaum a su solicitud escrita de llevar a cabo un diálogo para abordar las problemáticas que enfrenta la Presa Madín.

También lee: Peligran agua y ecosistema de Presa Madín con
Plan de Desarrollo de Naucalpan