Quién lo diría, si Marcelo termina por irse —posible, que no probable— se llevaría consigo a los idos de junio del priismo mexiquense y, por supuesto, al primer desgajamiento morenista. Entre los seguidores de Marcelo están un puñado de alcaldes, diputados y, quizá, algún senador. En Movimiento Ciudadano están emocionados, podrían brincar como segunda fuerza electoral en el Estado de México, se le acalambran los dedos de tanto hacer changuitos.
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Uno de los más ilusionados con mudarse a MC para realizar su sueño reeleccionista es Raymundo Martínez. El #ReyDelWatcho tiene un pie fuera del PRI y ve en Movimiento Ciudadano un bálsamo. Está aferrado a quedarse 3 años más en el gobierno y manejar otros 18 mil millones de pesos de dinero público a su antojo.
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Muy interesante será saber si el diputado morenista Daniel Sibaja se iría con Marcelo y si en compensación podría ser candidato de MC a la alcaldía de Ecatepec en acuerdo con Eruviel Ávila. Puede ser y, sin duda, sería competitivo. Fernando Vilchis no debe estar muy tranquilo.
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Una nueva Constitución Política para el Estado de México por supuesto que es necesaria. La idea no era mala, lo que estuvo muy mal es que un grupo pretendiera apropiarse de la causa. A la pérdida de Higinio y “Mexiquenses de Corazón” de la candidatura a la gubernatura, hay que sumarle la segunda derrota que significa el freno de tajo a la iniciativa que tanto acariciaron en la legislatura local. El golpe de mano de Delfina, con la fuerza de los millones de votos que la legitiman, fue contundente.
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Ricardo San Román, uno de los hombres que más dinero ganó abusivamente con Enrique Peña Nieto, primero como gobernador y después como presidente, ha intento por diversas vías acercarse al próximo gobierno a presentar sus negocios, pero una y otra vez ha sido rechazado. La gobernadora electa no quiere saber nada de él, sabe de su forma de operar y pésima reputación.