Personas privadas de su libertad en el Edomex también tienen que dar dinero a cambio de servicios para sobrevivir en las cárceles.
Al menos el 57.9 por ciento de las personas privadas de su libertad (PPLs) que se encuentran presas en el Estado de México han sido víctimas de corrupción durante su proceso penal —desde que las detienen hasta que van a juicio, así como en la vida intracarcelaria.
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La Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (Enpol) 2021, preparada por el Inegi, también señala que el 43.3 por ciento de las PPLs se sienten inseguras al interior de los centros penitenciarios.
También destaca que entre julio de 2020 y julio de 2021, el 47.5 por ciento de quienes se encuentran internos en cárceles del Edomex ha sufrido algún delito allí dentro. Robo de objetos personales (89.2%), lesiones físicas (24.6%) y extorsión (20.1%) son los delitos que más padecen.
Imagen tomada de la Enpol 2021
Pagar por estar dentro del penal
En agosto de este año, el familiar de una persona privada de su libertad —cuya identidad se mantendrá reservada por seguridad— en el Estado de México narró a AD Noticias que su hermano preso en el penal de Santiaguito paga por su estancia en ese centro.
«Ahí adentro todo se paga, ‘préstame 10 pesos, pero me regresas 50’… hasta los intereses están muy caros ahí», narra y su relato continúa:
«Si te ayudan a pasar algo [los custodios], tienes que darles para la próxima dos trastes de comida que te lleve tu visita. Todo pagas, por lo que sea.
«Para salir a visita, te cobran 10 pesos; para ir al baño, 10 pesos; te quieres bañar, 10 pesos; quieres guardar tu comida en refrigeradores, 30 pesos […]. Tienes que tener mucho dinero ahí adentro, cada semana tenemos que llevarle entre mil 500 y 2 mil pesos y aparte dejarle para la celda y lo demás».
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La Enpol señala que, a nivel nacional, el 55.3 por ciento de la población privada de su libertad pagó por el «pase de lista» en el último año.
También se paga por tener aparatos electrónicos, cambiar de celda, salir al patio de visita, recibir comida o medicamentos, ir a juzgados, acceder a servicios médicos, psicológicos o escolares, participar en algún taller, tener energía eléctrica en su celda.
Imagen tomada de la Enpol 2021