Fuerzas de seguridad federal resguardan las casas que han sido evacuadas tras el desprendimientos de rocas del Cerro del Chiquihuite, en Tlalnepantla, para dar seguridad a las personas que han tenido que desalojar sus hogares, y para evitar que exista saqueo y “rapiña”, ya que algunos vecinos habían expresado su temor a que estos hechos ocurrieran.
“El Ejército, la Fuerzas Armadas de México y de la Guardia Nacional han establecido dos círculos concéntricos de seguridad. Uno, donde nos encontramos a unos metros donde cayeron las rocas; y otro en las calles para dar certeza a la población de que sus bienes van a ser resguardados”, dijo en entrevista con medios de comunicación el General de Brigada Diplomado de Estado Mayor, Ernesto José Zapata Pérez.
Sobre las labores que realizan en el área de impacto del Cerro, “empezamos el día de ayer [domingo] con maquinaria pesada, como lo determinaron los especialistas ingenieros y geólogos, en virtud de que las personas de forma amanuense no podían realizar. La dimensión de las rocas que cayeron no permiten ni facilitan el acceso de las personas”, explicó el General.
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Además, se realizan actividades para estabilizar el área, para que poco a poco los especialistas determinen las acciones siguientes para la remoción de todos los escombros.
Entre estas actividades de estabilización se contempla reunir costales de arena de gran tamaño, de hasta una tonelada cada uno, que funcionan para estabilizar el área y poder realizar las actividades de remoción de escombros. “Una de las condiciones que establecieron ingenieros y geólogos es que lo más seguro es que sea maquinaria pesada y herramienta especializada”, añadió Zapata Pérez.
“Tal vez sea la primera vez que tengamos esta situación”
A pesar de la experiencia que las fuerzas armadas han acumulado durante décadas a través del Plan DN-III-E, esta sería la primera vez en la que enfrentan una situación con estas condiciones, según recordó el General de Brigada.
“En la aplicación del plan DN-III siempre se cuenta con la participación de ciudadanos, equipos de rescate y seguridad. Tal vez sea la primera vez que tengamos esta situación, donde las posibilidades de mover de inmediato y de realizar la remoción de escombro pesado se ha dificultado; pero yo creo que han sido importantes el trabajo que han hecho las autoridades de los tres órdenes de gobierno junto a la población civil que se ha mostrado solidaria a todas las actividades que se han realizado”.
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Además de las dificultades para remover las rocas de grandes dimensiones, los expertos se enfrentan también a las condiciones climáticas, como las lluvias atípicas que se han presentado en días recientes y que pueden reblandecer los cimientos. y los mismos apoyos que tienen las mismas rocas.
El integrante del Estado Mayor confirmó que las casas más cercanas a la ubicación de las rocas han sido desalojadas y se ha efectuado la notificación casa por casa junto a autoridades locales y estatales.
Este martes se cumplen cuatro días de la tragedia ocurrida en el Cerro del Chiquihuite que dejó a una persona muerta, una herida y tres personas aún sin localizar.