Toluca, México; 7 de septiembre de 2018. El Senado de la República reportó gastos de hasta 132 millones de pesos con cargo al erario durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto sólo por concepto de alimentos para legisladores y empleados. El nuevo presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) federal, Ricardo Monreal, publicó un desglose del gasto que se ejerció el año pasado, que supera los 33 millones, cantidad muy por encima de los 14.4 millones que se reportaron el primer año de la pasada legislatura. Cabe mencionar que este dato no es transparentado por la Cámara Alta y que fue presentado sólo por el presidente del Senado.
En el reporte, se evidencia que los servicios de buffet y de barra de snacks que se servía en cada sesión del pleno tuvo un costo superior a los 3.55 millones de pesos, es decir, un promedio de 45 mil pesos por servicio en el que, según testimonios de ex legisladores, se incluían bocadillos de salmón, camarones, quesos y jamón serrano. En la barra de snacks, por su parte, se podían encontrar chapatas, fruta, hortalizas crudas y bocadillos.
El informe del coordinador de Morena revela que, en 2017, el principal gasto en alimentación fue el de las bancadas, con 3.54 millones de pesos. Esa partida corresponde al pago por alimentos que eran servidos en las reuniones previas de cada Grupo Parlamentario. Las presidencias de los órganos de gobierno, como la Mesa y la Junta de Coordinación Política, ejercieron 1.8 millones de pesos en desayunos, sándwiches y fruta. Sólo por concepto de frutas, en 2017 la Cámara Alta pagó 1.1 millones de pesos.
Con la entrada de la nueva Legislatura, con mayoría de senadores de oposición, se implantó un plan de austeridad que propone la eliminación de pago de a senadores con cargo al gasto público. Esto fue cumplido en la primera sesión, en la que los legisladores sólo tuvieron acceso a café y agua. Sin embargo, Ricardo Monreal anunció que sí se instalaría barra de alimentos en los días de sesiones. Estas propuestas van acompañadas de otras que incluyen, entre otras, la eliminación de una suma de 392 mil pesos por senador para la adquisición de automóviles y computadoras.
Estos números reflejan por mucho la desigualdad económica en el país, pues, de acuerdo con el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico A.C., el 42% de los trabajadores tiene un ingreso laboral inferior a la línea del bienestar mínimo, que va de uno a tres salarios mínimos. Los 132 millones de pesos de gastos en la cámara equivale al salario de 16 mil 380 trabajadores que ganan el tope máximo de esta línea de bienestar mensualmente; a su vez, con los mismos 132 millones, se podrían cubrir el salario mensual de 49 mil 143 trabajadores que ganan sólo un salario mínimo.