Seis personas, tres niños y tres adultos, murieron este lunes en un tiroteo que tuvo lugar en un colegio privado cristiano en Nashville, Tennessee. La presunta agresora, Audrey Hale, una mujer transgénero de 28 años, llevaba al menos dos rifles de asalto y una pistola, según informó la policía local. Hale había estudiado en el colegio en el pasado y llevó a cabo el tiroteo con premeditación.
La joven entró en el colegio por una puerta secundaria, subió al primer piso y efectuó numerosos disparos, resultando en la muerte de tres alumnos y tres adultos. Las autoridades localizaron la vivienda de Hale y encontraron en el lugar planos del colegio donde estaban marcados detalles como las entradas y la ubicación de las cámaras de seguridad, así como un «manifiesto» y escritos que están siendo revisados. Se presume que Hale pensaba atacar otros sitios.
Las autoridades están investigando las posibles motivaciones del ataque, pero una de las líneas de investigación es el resentimiento de Hale hacia el colegio. Hale no tenía antecedentes penales y fue abatida por la policía. El suceso ha conmocionado a la comunidad local y ha generado un debate en torno a la regulación de la posesión de armas en Estados Unidos.