Toluca, Estado de México; 21 de septiembre 2019. Uno de los deportes más mexicanos, que une familias y separa amistades, que se vive en la lona y desde la tercera cuerda, que divide a rudos de técnicos está de fiesta: la Lucha Libre festeja este sábado sus primeros 86 años existencia.
La Lucha Libre es una mezcla de lucha grecorromana, olímpica y artes marciales mixtas; integra acrobacias teatrales que la convierten en todo un espectáculo lleno de magia y adrenalina, por ello el 21 de septiembre es un día dedicado a las grandes estrellas del Pancracio y los que la hacen posible.
¿Cómo surge el Día Nacional de la Lucha Libre?
En 2016 el Senado de la República presentó una propuesta para que cada 21 de septiembre se conmemorada el Día Nacional de la Lucha Libre, misma que fue aprobada con 75 votos a favor. El festejo se lleva a cabo desde 2017.
Se eligió el 21 de septiembre ya que ese día pero de 1933, la conocida Arena México, antes Arena Modelo, abrió las puertas a la Lucha libre, en esa misma fecha se creó la Empresa Mexicana de Lucha Libre, lo que hoy se conoce como el Consejo Mundial de la Lucha Libre.
El objetivo de dedicar un día a la Lucha Libre es que sea reconocida como un patrimonio intangible, popular y cultural de México.
La tradicional máscara
Uno de los elementos que más llaman la atención de este deporte es la mascara; sus colores y diseños las vuelven únicas, cada una de ellas dota de personalidad al luchador quien la porta, convirtiéndolo en toda una estrella del Pancracio.
En sus inicios el objetivo de las máscaras era que los luchadores no fueron identificados en su vida diaria y poder pasar desapercibidos. Se tiene registro que fue en Estados Unidos donde se usó por primera vez.
Las máscaras de luchadores llegaron a México, gracias a Don Salvador Luttherot quien descubrió que el luchador Ciclone Mackey, salía a luchar con la cara cubierta, usando una máscara que formaba parte de su personalidad arriba del ring.
En México, el primer luchador en portar una máscara fue el Murciélago Velázquez, originario de Dolores, Hidalgo.
Con el paso de los años, el uso de la máscara se fue haciendo popular, y sin duda la que más es conocida en todo el mundo es la máscara de El Santo. Sus exhibiciones en el ring lo mostraron ante el pueblo mexicano, pero sus apariciones en el cine, a lado de Blue Demon, lo proyectaron al mundo.
¿Qué pasa cuándo un luchador pierde su máscara en combate?
Otra de las características de la Lucha Libre en México, son las famosos apuestas de “máscara vs cabellera” o “máscara vs máscara”, que causan gran expectación entre los amantes de este deporte.
Entre los luchadores hay un reglamento que indica que cuando uno de ellos pierde la mascara debe de revelar su nombre, edad, fecha y lugar de nacimiento, así como su profesión; además no puede volver a enmascararse durante cinco años. El cumplimiento de estas reglas son vigiladas por las Comisiones de Los y Lucha Libre que hay en cada entidad del país.
Grandes estrellas
Son decenas de luchadores que día a día buscan consolidarse en gusto del público mexicano, aquí te decimos cuáles son los más famosos.
El Santo
Uno de los luchadores más conocidos a nivel mundial, estrella del Pancracio y del cine mexicano, combatió contra rudos y técnicos, pero también contra momias y extraterrestres.
Siempre impecable con su máscara plateada campeón del CMLL.
El Perro Aguayo
Conocido también como el “Can de Nochistlán”, uno de los rudos más famosos y que siempre subía al ring con sus botas peludas. Fue campeón de la Triple A y en 1998 conquistó el título del Rey de Reyes.
Mil Máscaras
Fue de los primeros luchadores en llegar a Estados Unidos, el primero en pelear enmascarado en el Madison Square Garden.
¿Qué otro luchador puede ser considerado una estrella del Pancracio mexicano?
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