Todo comenzó con un dolor de piernas; más tarde le detectaron cáncer en el fémur, llevándolo a perder su pierna derecha. Hoy, después de un año, Matías venció el cáncer y lo celebró con un recorrido por las calles de Toluca.
Su madre, Cinthia Aranda, nos contó un poco más sobre su historia. Le diagnosticaron cáncer cuando su abuelita le sintió una bolita en su pierna que le dolía mucho.
Luego le detectaron un tumor en el fémur derecho llamado osteosarcoma, que no es muy común en niños de 6 años.
Dos meses después, en mayo, le amputaron su extremidad derecha, para que el tumor no se expandiera a otros huesos.
“El 25 de febrero cumplimos un año que nos dieron el diagnóstico de Mati, pero estoy que no me la creo, que pasamos por todo eso, con momentos buenos y malos. Pero todo lo hemos tomado como una experiencia”.
Este domingo, sus familiares realizaron un recorrido por las calles de Toluca; adornaron sus automóviles con frases motivacionales para Matías con la intención de celebrar que ganó la batalla contra el cáncer.
Su última batalla
Con el apoyo de su familia y amigos, hoy Matías ha ganado la batalla. Solo le queda dar el último paso, que es enfrentarse a una quimioterapia más el próximo 6 de marzo. Es su última quimioterapia ambulatoria, una esperanza que deja satisfacción después de un proceso arduo y constancia para vencer el cáncer.
La tomografía realizada hace dos meses arrojó que no cuenta con células cancerosas en ninguna otra parte de su cuerpo.
“Él tiene una frase: ¡Nada es imposible! Y a pesar de que ha habido momentos complicados, ha tratado de salir adelante. Tiene mucha ilusión de seguir adelante, de ir a la escuela. Realmente Mati le puso todas las ganas”, expresó Cinthia.
Familiares y amigos esperan que el próximo 16 de marzo Mati pueda tocar su campanita y comenzar con una nueva etapa de su vida.
