Últimamente se ha puesto de moda que los gobiernos locales y el federal emitan mensajes en los medios de comunicación acerca de sus actividades y logros, incluso me atrevo a manifestar que ha sido excesivo el uso que se le ha dado a esta herramienta.
Referente a ello, la Suprema Corte Justicia de la Nación aprobó un proyecto mediante el cual se ordena al Congreso de la Unión emitir una ley que regule la publicidad oficial con término a la fecha 30 de abril del 2018.
Recordemos que la resolución deriva de la revisión de un amparo promovido por la organización defensora de la libertad expresión “Artículo 19” que está dedicada a promover y defender la libertad de expresión en el mundo. En la argumentación que realiza la organización se queja de la inacción del Congreso, pues desde el mes de febrero del año 2014 estaba obligado a regular el gasto publicidad oficial, tal y como había quedado establecido en la reforma político-electoral, publicada el 10 de febrero del mismo año, en el artículo 134 Constitucional.
En el cuerpo de la sentencia, los ministros establecen que la omisión legislativa viola la libertad expresión, de prensa y de información, pues estos derechos requieren de medios libres que la transmitan a los ciudadanos y para ello es necesario que los mismos cuenten con ingresos económicos suficientes. Para la Corte, la falta de regulación propicia un ejercicio arbitrario del presupuesto en comunicación social lo que consideró como una restricción indirecta a la libertad de expresión.
Recordemos que en nuestro país el diseño normativo tiene un equilibrio de poderes y es por eso que el Congreso de la Unión no es libre para decidir si legisla o no, sino que puede ser obligado por el Poder Judicial a que cumpla con su tarea de hacerlo.
Estimado lector, lo cierto es que la claridad y la transparencia en la ley da mayor equilibrio y equidad al gasto público que pueden tener los gobiernos; ahora bien, llegó el momento de dejar de abusar del marketing, del spot y de la pauta pues los problemas que enfrentamos no se resuelven con ello, es necesario buscar otras formas de comunicación y acercamiento con los ciudadanos, ampliando el debate y la comunicación directa con los gobernados.