Amnistía a delincuentes

Hace unos días uno de los aspirantes a candidatos a la Presidente de la República manifestó valorar dentro de sus propuestas utilizar la amnistía a los delincuentes del crimen organizado, con dos objetivos primordiales: el primero de ellos generar un ambiente de paz en nuestro país y; el segundo conocer lo ocurrido con algunos hechos […]

Hace unos días uno de los aspirantes a candidatos a la Presidente de la República manifestó valorar dentro de sus propuestas utilizar la amnistía a los delincuentes del crimen organizado, con dos objetivos primordiales: el primero de ellos generar un ambiente de paz en nuestro país y; el segundo conocer lo ocurrido con algunos hechos delictivos.

Lo que se generó con esta opinión fue una gran polémica respecto de la posible propuesta, pero es importante conocer porque es o no viable la misma.

La amnistía un instrumento jurídico que consiste en perdonar los delitos que ha cometido una persona o un grupo de personas, este se debe distinguir del indulto, que consiste en perdonar las penas impuestas a una persona que ya ha sido sentenciada por un juez.

En América Latina encontramos 2 experiencias relativas al tema:

1.- Año 2003 en Colombia se firmó un acuerdo con los grupos guerrilleros, de manera inmediata bajaron un 50 por ciento los homicidios y un 80 por ciento los secuestros, pero luego de un tiempo la violencia tomó de nueva cuenta su cauce, además aquellas personas que no estuvieron a favor de dicho acuerdo se unieron a otros grupos delincuenciales. Posteriormente para el año de 2016 se firmó un acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y aunque es muy pronto para hablar de resultados, este acuerdo fue muy polémico debido a que las víctimas y sus familiares se sintieron poco valoradas y tomadas en cuenta, los integrantes de los grupos armados entregaron las armas a cambio de compurgar penas mínimas y muchos serían incluidos en la vida política de aquel país.

2.- Para el año 2012, en El Salvador se firmó un acuerdo entre el gobierno y la pandilla internacional Mara salvatrucha, los primeros meses el crimen se contuvo, pero al poco tiempo el índice de homicidios subió un veinte por ciento más anterior al acuerdo.

Estos antecedentes que se basaron en una especie de amnistía, no sirvieron para dar paz a los estados que la promovieron, sino todo lo contrario, pues detonó más violencia.

Lo importante es entender que para generar la paz no es necesario medidas polémicas, ni extraordinarias, pues simplemente se debería fortalecer el imperio de la ley, combatiendo la corrupción e impunidad y fomentando la prevención del delito, argumentos que se apoyan por organismos internacionales y académicos.