La presa Miguel Alemán en Valle de Bravo resiente la época de estiaje, su nivel no ha subido medio metro, cuando debe tener de 7 a 10 metros.
Para Ignacio Pichardo, ex diputado federal esta problemática esta dejando al descubierto otras afectaciones en la presa, no son solo las lluvias, sino la contaminación de drenajes, la basura que se arroja al embalse, la invasión de casas en áreas federales, la presencia de algas, las lluvias, y la presa esta perdiendo su capacidad de almacenaje.
«Estamos viendo que la presa a perdido su capacidad, se está azolvando, porque la deforestación que sucede en toda la cuenca hace que los ros vengan cargados de tierra, de arenas, entonces la presa está perdiendo su capacidad de almacenaje» explica.
Según información de CONAGUA expresada por el presidente municipal de Valle de Bravo para mayo la presa alcanzará a penas a cubrir del 60 al 65 por ciento de su capacidad.
Esta situación será cada vez más grave si no se apuesta por cuidar el ecosistema completo, expresa Ignacio Pichardo, pues el sistema Cutzamala hoy depende de todos los niveles de gobierno y la debida atención a las problemáticas actuales y por venir.